Como lo explicábamos en otros artículos, un feto de 12 semanas de edad fetal equivale a 14 semanas de edad gestacional. Para determinar la edad fetal los médicos se valen de diversos recursos ya que es imposible saber cuándo se produjo exactamente la concepción. La nueva vida que se desarrolla en tu útero ya ha dejado de ser un embrión y se parece cada vez más al bebé que será cuando nazca, pero aún debes tomar precauciones.
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Feto de 12 semanas, características de su desarrollo
¿Te encuentras en la semana 14 de embarazo? ¡Felicitaciones! Esto significa que la nueva vida tiene una edad fetal de 12 semanas. Hace cuatro semanas alcanzó la categoría de feto, pues hasta ese momento se consideraba un embrión, y se parece cada vez más al bebé que será cuando nazca.
Las futuras mamás suelen imaginar a su hijo, desde el comienzo del embarazo, como un diminuto bebé. Pero la nueva vida debe atravesar varias etapas y muchos cambios antes de convertirse en un ser con aspecto humano, y no deja de sorprender que lo que comenzó con la unión de dos microscópicas células pueda convertirse en los 9 meses que dura un embarazo, en nuestro adorado bebé.
Veamos ahora qué está ocurriendo allí:
- Medidas del feto: El feto de 12 semanas mide alrededor de 10 cm. desde la coronilla hasta las nalgas y pesa aproximadamente unos 50 gramos.
- Crecimiento: comienzan a formarse los rasgos faciales; los músculos se desarrollan y adquieren movilidad. Si pudieras verlo ahora, descubrirías que puede hacer algunas muecas.
- Los ojos se van moviendo hacia el centro del rostro, la nariz toma más forma y empieza a crecer pelo, en la cabeza y las cejas.
- Todos los órganos están comenzando a funcionar. Los intestinos comienzan a moverse adentro del vientre; el hígado ya comienza a secretar bilis que luego servirá para la digestión de las grasas. El páncreas comienza a producir insulina.
- Los tejidos de la cabeza, brazos y piernas comienzan a fortalecerse y van camino a convertirse en huesos. El feto de 12 semanas ya comienza a orinar en el líquido amniótico; para cuando finalice el embarazo, prácticamente todo el líquido amniótico será orina fetal.
- La piel todavía es muy transparente y comienza a cubrirse de un fino vello llamado lanugo, que persistirá hasta la semana 26. Este pelo sirve para proteger la piel de líquido aminótico.
Cambios en tu cuerpo
Las náuseas matutinas y la fatiga comienzan a disminuir; por primera vez desde que estás embarazada te sientes llena de energía y hasta… ¡sexy! No desaproveches esta oportunidad para fortalecer los vínculos con tu pareja.
Inclusive mejora tu estado de ánimo y puede ser que comiences a sentir los movimientos del feto. ¡Recuerda que ya estás en el segundo trimestre!
En realidad, en este trimestre las hormonas se estabilizan y para muchas mujeres es la mejor etapa de su embarazo.
Sin embargo aún puedes tener algunos síntomas como agotamiento, y puedes experimentar pérdidas de líquido en tus senos, que se están preparando para amamantar.
Este líquido se denomina calostro, es de color amarillento, espeso y pegajoso, y es un precursor de la leche materna.
También puede aparecer el dolor en los ligamentos redondos. Es porque el útero crece rápidamente; se perciben en el abdomen bajo cuando te levantas o cambias de posición en forma brusca.
La panza ya se nota lo suficiente como para parecer embarazada, aunque todavía no sea necesario usar ropa para futura mamá: bastará con adecuar algunas de las prendas que utilizas habitualmente.
Cosas para hacer y en qué pensar con un feto de 12 semanas
Si todavía no anunciaste tu embarazo… ¡es el momento de comenzar a pensar cómo comunicar la buena nueva! El feto de 12 semanas ya está lo suficientemente afianzado como para que el peligro de un aborto espontáneo.
Aunque en esta etapa el riesgo sea mínimo (según la NIH, éste puede producirse hasta la semana 20 de embarazo) no dudes en contactar con tu médico si sientes calambres o aparece manchado o sangrado vaginal.
Durante el segundo trimestre, precisamente entre las semanas 14 a 20, se realiza un análisis de sangre para detectar problemas como sindrome de Down, trisomía 18 y defectos del tubo neural.
Todavía no se puede saber con precisión el sexo del futuro bebé, pero en tu próxima consulta prenatal ya podrás escuchar los latidos de su corazón.
Nunca es demasiado tarde como para adoptar una alimentación saludable. En esta etapa es importante incorporar alimentos integrales, con muchas vitaminas, y frutas ricas en antioxidantes.
Evita alimentos como los mariscos, las carnes poco cocidas y los huevos crudos.
En cuanto al ejercicio: caminar, nadar, hacer yoga y pesas livianas son excelentes opciones. Sí deben reemplazarse los ejercicios que requieren que te acuestes boca arriba, ya que el aumento de peso del útero puede disminuir el flujo de sangre hacia el corazón, provocando mareos y también disminuyendo la llegada de oxígeno al feto.
El yoga prenatal es muy bueno, ya que te ayuda a fortalecer los músculos para el parto, y mejorar la flexibilidad y equilibrio.
Ya debes comenzar a pensar en tus próximas decisiones, como gestionar el permiso de maternidad en tu lugar de trabajo e inscribirte en las clases de educación para el parto. Es conveniente hacerlo con tiempo ya que las vacantes se cubren rápidamente. También es importante que tu pareja te acompañe y aprenda a la par tuya las diferentes técnicas que te enseñarán.
A pesar de que el segundo trimestre es una verdadera “luna de miel” con el embarazo, saber que estás embarazada con un feto de 12 semanas todavía puede producir temores e inseguridad.
No dudes en consultar con tu médico y especialmente compartir tus temores con tu pareja. Muchas mujeres se sienten inseguras acerca de si serán buenas madres o están ansiosas por los resultados de las pruebas prenatales.
Todo esto es normal, y en la medida en que compartas tus preocupaciones con tu médico te sentirás más relajada y podrás disfrutar aún más de esta etapa. Después de todo… ¡no muchas veces en la vida estarás embarazada!
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