Para las mujeres la progesterona es un aliado muy importante. Sobre todo durante los años de madura juventud, cuando la mayoría tiene planes de formar una familia. No obstante, muchas de nosotras no percibimos los signos de desequilibrio de esta hormona. A continuación, te explicaremos los riesgos que la progesterona baja puede causar en tu salud.
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Contenido
- 1 ¿Sabes qué es la progesterona?
- 2 Complicaciones al tener la progesterona baja
¿Sabes qué es la progesterona?
La progesterona es una de las principales hormonas sexuales femeninas, aunque en realidad se llame hormona de la gestación. Y, como lo podrás estar deduciendo, su nombre significa ‘promover la gestación’, por eso está encargada de aumentar las posibilidades de embarazo.
Esta hormona se produce en los ovarios luego de la ovulación, en el ciclo menstrual y mantenimiento del embarazo. En realidad, su principal función es preparar el útero para el embarazo. Tras la ovulación, esta ayuda a dilatar el revestimiento del útero para acoger al óvulo fertilizado. Pero al no darse fecundarse el óvulo, sus niveles caen nuevamente para dar paso a la menstruación.
Los niveles saludables de esta hormona también son necesarios para el desarrollo de los senos en el proceso de lactancia. Para los hombres, quienes la producen en menor cantidad, les ayuda en la producción de la esperma.
Complicaciones al tener la progesterona baja
Las principales complicaciones causadas por los bajos niveles de esta hormona se notan durante la edad posmenopáusica. Sin embargo, los niños también pueden presentar deficiencia de progesterona aumentando el riesgo en su salud, incluso de infertilidad. Este desequilibrio hormonal puede causar síntomas muy desagradables como:
Aumento del estrógeno
La progesterona se encarga de mantener los niveles de estrógenos estables. Por lo que cuando está baja, el estrógeno toma dominio en el organismo, causando disfunción eréctil o celulitis. Además, también ocasiona fibromas en ovarios o mama, venas varicosas, cambios de humor, aumento de peso y cólicos menstruales. El dominio del estrógeno también puede aumentar los riesgos de cáncer de mama.
Problemas de fertilidad y de menstruación
Así como el estrógeno es importante para el revestimiento del útero antes del embarazo, la progesterona también. Esta se encarga que el revestimiento se mantenga durante los 14 días después de la ovulación en caso de fecundación. Al fecundarse un óvulo, la progesterona aumenta sus niveles. De lo contrario, vuelven a caer dando paso a revestimiento uterino, conocido como menstruación.
Pero cuando los niveles son crónicamente bajos, este proceso no se da correctamente, causando ciclos irregulares y problemas para concebir. Asimismo, ocasiona cólicos menstruales, migrañas premenstruales y síntomas premenstruales muy marcados.
Aumento de peso
La hormona de pro gestación con niveles saludables ayuda al organismo a quemar las reservas de grasa. En cambio, con la progesterona baja, este proceso no se dará, minimizando la energía en el cuerpo.
De esta manera, se pierden los beneficios anticatabólicos que proporciona, generando que el torrente sanguíneo extraiga glucosa. Lo que significa que el sistema comienza a descomponer el tejido muscular, buscando aumentar los niveles de energía.
Retención de líquidos
La progesterona en sus niveles estables funciona como diurético natural, evitando que las células atraigan agua y excesos de sodio. Por lo que impide que se retengan líquidos en el cuerpo. Sin embargo, con la progesterona baja, estos se acumulan en las piernas, tobillos, barriga y dedos. Por eso, muchas mujeres se quejan de tener la cara hinchada y los pechos doloridos y pesados.
Alteración del estado de ánimo e insomnio
Puede causar desorden de ansiedad y bajo estado de ánimo, ya que contiene acciones antidepresivas y ansiolíticas. Estas elevan los niveles de serotonina en el cerebro y ayudan a manejar la depresión y el insomnio.
Pérdida de colágeno en la piel
Cuando existe un nivel suficiente de progesterona, la piel se mantiene flexible y tersa ya que esta ayuda en la estimulación y la producción de colágeno en el organismo.
Terapias hormonales para el déficit de esta hormona
Estos tratamientos para la progesterona baja constan de diferentes etapas. Una de ellas implica una terapia hormonal para la nivelación de estrógeno y progesterona en las mujeres. De esta manera, se puede conseguir un revestimiento uterino para un embarazo saludable. Estas terapias hormonales también se aplican para los casos de menstruación irregular y sangrado anormal.
Pueden ayudar a controlar con mayor efectividad los síntomas de menopausia. Entre ellos se encuentran los sofocos, la sudoración nocturna y la resequedad vaginal. Estas terapias mejoran el estado de ánimo de las pacientes y reducen los riegos de osteoporosis y diabetes.
Sin embargo, también pueden aumentar los riesgos de accidentes cerebrovasculares, problemas en la vesícula biliar o de coágulos sanguíneos. Para pacientes que han sufrido cáncer de mama o cáncer endocrino no se le recomienda aplicar esta terapia.
Otros tratamientos
Para los casos severos de progesterona baja que incurren en la menopausia, se aplica la terapia combinado estrógeno y progesterona. También hay tratamientos como:
- Aplicación de geles y cremas tópicas de vía vaginal, en el caso de las mujeres.
- Supositorios, el cual es uno de los principales métodos para cuando la baja progesterona causa infertilidad.
- Medicamentos orales con progesterona.
- Aros vaginales para regular la liberación de las hormonas.
Mantener una alimentación saludable
Con una alimentación saludable, rica en vitaminas, C, E y B6 y minerales como el magnesio. Le brindarás a tu cuerpo el entorno necesario para aumentar los niveles o evitar que bajen.
Identifica si tienes la progesterona baja
Los niveles estables de progesterona en una mujer que no está planificando el embarazo se sitúan entre 0.2-1 ng/ ml. Esto sucede antes de ovular. Pero cuando está en período de ovulación puede aumentar a 5ng/ml. Tras el proceso de fecundación, pueden llegar a 200 ng/ml, que es el nivel ideal para un embarazo saludable.
Para las mujeres con progesterona baja durante el embarazo se le recetan suplementos y medicamentos. Esto tiene como finalidad evitar un aborto. El otro caso, para las que no están embarazadas, también a hombres y niños, se les recomienda mantenerlos bajos. Es decir, no mayores al de las mujeres en la etapa premenstrual.