Virus Sincitial Respiratorio, causante de infecciones respiratorias

La actual pandemia del COVID-19 ha determinado que cada vez que pensemos en un problema respiratorio que puede afectar a nuestros hijos la mente se concentre en eso, pero hay otro enemigo acechando… el Virus Sincitial Respiratorio (VRS). Este virus es un agente causal de infecciones respiratorias bajas y algo que preocupa a la comundidad médica porque en ocasiones no se le presta la atención que requiere.

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Problemas respiratorios en los niños

En varias ocasiones desde Canal Chupete, nos hemos referido a las enfermedades respiratorias en los niños porque son muy frecuentes, tanto que es común que se presenten entre 5 y 6 veces cada año.

Uno de los gérmenes que se relaciona con estas infecciones respiratorias bajas es el Virus Sincitial Respiratorio. Estas infecciones son más graves en ancianos y niños, aunque puede afectar a todas las edades. Es especialmente grave en niños menores de un año.

Estas infecciones se manifiestan desde el inicio del otoño hasta la primavera.

Importancia de las infecciones inferiores causadas por el Virus Sincitial Respiratorio

Cuando se habla de infecciones respiratorias bajas nos estamos refiriendo a aquellas que se localizan en bronquios, bronquiolos y pulmones.

Según los datos de los sitios especializados cada año se producen 33 millones de infecciones  respiratorias bajas en niños menores de 5 años. De ellos alrededor de 3 millones deben ser hospitalizados y 60 000 mueren. La mayoría de estas muertes se producen en los países en desarrollo.

Cada año en España se producen unos 270 000 casos de bronquiolitis en niños, de los cuales requieren hospitalización entre 15 000 y 20 000. La mayoría producidas por el Virus Sincitial Respiratorio.

Otro aspecto relevante sobre este virus es que los niños que han sufrido una infección grave, tiene mayores posibilidades posteriormente de padecer dificultades respiratorias, alergias y asma.

Todo lo anterior tiene repercusiones económicas en los sistemas sanitarios de los diferentes países. En España, anualmente se producen casi dos millones de consultas en atención primaria debido a la bronquiolitis y se estima que cada caso cuesta alrededor de 2 500 euros y alrededor de tres millones de días de atención por parte de los padres.

Formas de transmisión del Virus Sincitial Respiratorio

El Virus Sincitial Respiratorio se disemina mediante microgotas que se liberan cuando una persona enferma tose, estornuda, o por sus secreciones nasales. También puede mantenerse vivo en superficies, objetos usados u otros materiales hasta por 5 horas.

Se estima que los niños al cumplir los dos años prácticamente todos lo han padecido. Es común el contagio con este virus en guarderías y en lugares de cuidados colectivos o en donde convivan numerosas personas.

Síntomas de las afecciones por el  Virus Sincitial Respiratorio

Los síntomas pueden variar acorde con la edad del pequeño. La mayoría de las veces los síntomas de este virus son muy leves, que se manifiestan como un catarro común. Por lo general los primeros síntomas se presentan entre 4 y 6 días después de adquirir el agente infeccioso.

Cuando los niños son mayores los síntomas de la infección por el Virus Sincitial Respiratorio pueden manifestarse por tos perruna parecida a los sonidos que emiten las focas, fiebre baja y congestión nasal. Los bebés menores de un año, pueden tener síntomas más severos sobre todo mayor dificultad para respirar está asociado a que sus bronquiolos son más pequeños y estrechos.

Cuando esta infección se produce en un niño menor de un año, además de los síntomas anteriores podría tener respiración rápida y muy agitada, las fosas nasales se expanden tratando de tomar más aire, mueven la cabeza al respirar, hacen ruidos al respirar y se escucha como un silbido. Otro signo es cuando al respirar los músculos intercostales se deprimen, o en la parte inferior del cuello o respiración estomacal. Podrían ser síntomas iniciales de una bronquiolitis.

En los estados más severos se puede presentar coloración azulada fundamentalmente en los labios y en los extremos de los dedos de manos y pies.

Si los síntomas anteriormente descritos se manifiestan, se podría sospechar que se trate de una bronquiolitis y requiere tratamiento médico. En numerosos centros hospitalarios se pueden realizar pruebas diagnósticas rápidas que permiten la confirmación del diagnóstico. También se emplean las radiografías de tórax.

La bronquiolitis es la principal afección causada en su gran mayoría por el Virus Sincitial Respiratorio, aunque también puede ser producido por otras agentes virales. En España se considera que es la principal causa de ingreso hospitalario en los bebés menores de un año.

Factores de riesgo que aumentan las posibilidades de afectarse por el Virus Respiratorio Sincitial

Hay una serie de factores que incrementan las posibilidades de que tu hijo pueda adquirir el Virus Respiratorio Sincitial. Entre ellos se encuentran los siguientes:

• Exposición al humo del cigarro.
• Asistencia a guardería y otros centros de cuidado colectivo de niños.
• Convivir con niños en edad escolar.
• Vivir en condiciones de hacinamiento.
• Bebés prematuros.
• Pacientes con problemas graves de corazón que afecten su funcionamiento.
• Niños afectados con síndrome de Down.
• Pequeños con enfermedades neuromusculares.
• Algunas enfermedades congénitas como el síndrome  velocardiofacial.
• Bebés con enfermedad pulmonar crónica.
• Lactantes con displasia broncopulmonar.
• Los niños con defensas inmunológicas bajas.

Cuando los niños menores de dos años tienen alto riesgo de contraer una infección por el Virus Respiratorio Sincitial podría ser necesario emplear el Palivizumab para su prevención. Hay indicaciones muy específicas de cuáles son los bebés en los que está justificado emplear este anticuerpo monoclonal, pero siempre ordenado por un pediatra.

Tratamiento y pronóstico de las infecciones por Virus Sincitial Respiratorio

Al tratarse de una enfermedad viral los tratamientos con antibióticos no son eficaces contra las afecciones producidas por el VSR. Cuando las mismas son  leves y moderadas desaparecen sin tratamiento.

Cuando está asociada a una bronquiolitis o una infección severa de acuerdo a cada caso puede ser necesaria el uso de oxígeno, aire humidificado, sueros intravenosos, aspiración de las secreciones nasales y podría llegar a requerir el uso de un sistema de respiración artificial.

Cuando existen factores de riesgo como los previamente mencionados la enfermedad puede ser más grave. Si es diagnosticada tempranamente las posibilidades de muerte se reducen considerablemente.

Previniendo las infecciones por Virus Sincitial Respiratorio

Como previamente mencionamos la prevención está directamente relacionada con las formas de transmisión, es por ello que para ayudar a prevenir el VSR, es importante:

• La primera medida de prevención es mantener la lactancia materna al menos durante los primeros 6 meses de vida.
• Todas las personas relacionadas con la atención a un bebé deben lavarse las manos con gran frecuencia.
• No permita que nadie toque a su bebé sin antes lavarse las manos adecuadamente.
• No permita que personas con síntomas de gripe o fiebre se acerquen a su bebé y si tienen que hacerlo que usen máscara de protección.
• Inste a familiares y amigos que no besen a su bebé en los primeros meses de vida.
• No exponga a su bebé al humo del cigarrillo porque aumenta el riesgo de contraer la enfermedad.
• Evitar la exposición de los bebés a ambientes con gran concentración de personas y hacinamiento.
• La única intervención farmacológica aprobada para la prevención es la administración de Palivizumab siempre y cuando un especialista lo prescriba en niños con gran riesgo de padecer una infección grave por VRS.
• Mantenerte al tanto de los brotes locales de Virus Sincitial Respiratorio o en las guarderías para evitar la exposición.

Hay instituciones y empresas farmacéuticas que trabajan en el desarrollo de vacunas como una alternativa de prevención. Así que es una buena noticia, pero todavía hay que esperar…

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