La enfermedad de Lyme es una de las afecciones que pueden producir las garrapatas. En niños se presenta con más frecuencia que en adultos. Esto se debe a que son ellos quienes pasan más tiempo interactuando con sus mascotas y jugando al aire libre.
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Al ser las garrapatas el agente transmisor de esta enfermedad, los sitios con abundantes arbustos, los lugares de acampada u otros donde se expongan a estos ácaros (granjas, pilas de hojas, lugares de mucho follaje) los exponen con más frecuencia.
Pero sufrir una picada de garrapata no significa por fuerza que su hijo va a contraer esta enfermedad, ni ninguna otra trasmitida por este vector. No obstante, por su peligrosidad, se debe estar atento a sus síntomas y tratar de prevenir su contagio[.
¿Qué es la enfermedad de Lyme?
La enfermedad de Lyme es una enfermedad infecciosa provocada por una bacteria gram negativa Borrelia burgdorferi, que es transmitida por las garrapatas de la especie Ixodes ricinus.
Se estima que solo se contagia una vez transcurridas 36 horas luego de que el ácaro se fija a la piel del hospedero. Este es el tiempo que demora la bacteria en migrar del estómago de la garrapata al torrente sanguíneo del afectado.
Su distribución es universal, pero predomina en el hemisferio norte. En Europa se extiende por la región central, noroeste y este. No es considerada una enfermedad frecuente en Europa su prevalencia es de 120 casos por cada 10 000 habitantes. En España se encuentran en prácticamente toda la península ibérica[: Asturias, Cantabria, Cataluña, Galicia, La Rioja, Madrid, Navarra, Norte de Castilla y León y País Vasco, Se estima una incidencia de y la incidencia 0,3 afectados por 100.000 consultas hospitalarias al año.
¿Cuáles son los síntomas de la enfermedad de Lyme en niños?
Si en la zona picada aparece una mancha rosada llamada eritema migrans, se debe llevar al niño al médico de inmediato. Esta enfermedad puede causar manifestaciones neurológicas crónicas, por lo que es vital tratarla en sus primeros estadios[.
Uno de los síntomas más característicos de la picada de garrapata infestada con la bacteria productora de la enfermedad de Lyme es el eritema migrans
La enfermedad de Lyme en niños provoca síntomas que no difieren de los de una gripe común, y sólo cuando se agravan es que por lo general cuando los niños son llevados a consulta.
Existen tres fases de enfermedady los síntomas dependen de la fase en la que se encuentre:
La primera fase es denominada precoz localizada. El primer síntoma y que aparece en un 80% es la erupción macular en la zona de la picadura llamada eritema migrans. No es dolorosa y se expande generando un halo circular. Aunque desaparece por sí sola es una señal patognomónica, o sea, un claro indicador de la enfermedad de Lyme. El otro síntoma característico es el dolor en las articulaciones.
Puede producirse además sensación de fatiga, dolor de cabeza y dolores musculares.
Durante la segunda fase denominada precoz diseminada, el eritema puede presentarse en diferentes regiones. La enfermedad de Lyme también provoca irritación y molestias, problemas neurológicos como dolor en las raíces nerviosas. Los otros síntomas de la enfermedad de Lyme son dolor de cabeza que no cede con medicamentos, fotofobia, mareos, cuello rígido, dolor de espalda, somnolencia, problemas de memoria, de concentración, y debilidad generalizada que va aumentando de forma progresiva. Pueden producirse manifestaciones cardiacas y articulares.
Si el diagnóstico se enmascara, la enfermedad puede complicarse y pasar a la tercera fase o crónica. Pueden aparecer parálisis facial, inflamación de las rodillas y afectación del sistema nervioso central y periférico. De no atenderse a tiempo, esta enfermedad puede dejar secuelas crónicas[.
Diagnóstico y tratamiento de la enfermedad de Lyme en la infancia
Ante la evidencia de una picadura de garrapata previa y la aparición del eritema migrans, se procede a suministrar antibióticos al paciente. No obstante, para corroborar el diagnóstico pueden indicarse algunos exámenes de serología.
El examen sanguíneo no dará positivo hasta que hayan pasado unas 6 semanas como máximo luego de la infección. Por ello, es probable que al niño le sea indicado un segundo análisis.
Doxiciclina es el medicamento más eficaz contra esta espiroqueta, cuando existen afectaciones del sistema nervioso, de las articulaciones o el corazón se emplean las cefalosporinas intravenosas. En niños pequeños se recomienda el empleo de la amoxicilina por vía oral, dos veces al día, durante 2 o 4 semanas. Los niños alérgicos a este medicamento se tratan con cefuroxima axetil dos veces al día.
Cuando se detecta esta enfermedad en estadios tempranos se controla con facilidad con antibióticos. En estos casos no aparece ninguna secuela permanente[.
¿Cómo ayudar a recuperarse a los niños con enfermedad de Lyme?
La mejor manera de ayudar a la recuperación del niño es no interrumpir el tratamiento. Junto a eso, debe procurarse que descanse tranquilo, aunque los dolores articulares pueden tardar en desaparecer
Como este síntoma persiste más que otros, por lo general los padres se preocupan. Incluso, luego de haberse curado, las pruebas de sangre pueden continuar siendo positivas meses o años después. Esto no quiere decir que el niño aún continúa enfermo, sino que ciertos anticuerpos permanecen en su torrente sanguíneo[.
¿Cómo evitar la enfermedad de Lyme?
Para evitar la enfermedad de Lyme en los niños en principio no se deben exponer a sitios al aire libre donde se conoce que se han reportado casos de esta enfermedad. En general tampoco a lugares donde abunda la vegetación y animales que pueden transportar las garrapatas.
Como es lógico, esto no es factible en la práctica. En su lugar sí resulta efectivo el uso de repelentes de insectos. Cuide también que vistan con calzado cerrado, pantalones y camisas de mangas largas cuando se realizan actividades en zonas rurales. Sobre todo, revise cuidadosamente la piel de sus pequeños al regresar de estas excursiones.
Revise el cuerpo de los niños. Ponga atención en los sitios más cálidos, como son las axilas, el cuello, el cuero cabelludo y la parte interior de las piernas y nalgas.
Si descubre una garrapata adherida a la piel, extráigala con cuidado y lo más pronto posible. Utilice para desprenderla una pinza de puntas finas. Sostenga al ácaro lo más cercano posible a la piel. Tire despacio pero con firmeza hacia arriba hasta que se desprenda. Luego, lave la zona con abundante agua y jabón. Por ningún motivo use calor para hacer que la garrapata salga. Esto aumenta la posibilidad de que el niño se infeste.
Anote la fecha de la picadura de la garrapata y observe la zona picada durante dos semanas como mínimo. Si observa que se desarrollen síntomas durante ese tiempo, no dude en acudir al médico de inmediato[.
Luego de haber sufrido la enfermedad de Lyme el niño no es inmune de por vida. Si vuelven a ser picados por una garrapata infectada enfermarán nuevamente. Aunque no es una enfermedad grave y su pronóstico es favorable, puede dejar secuelas crónicas. Es por eso que se deben tomar las debidas precauciones para evitarla.