Vacaciones con niños… nada terrible si las sabes organizar

Unas vacaciones con niños pueden convertirse en realmente inolvidables por haberlas disfrutado con alegría y buen humor o… ¡por los berrinches que hubo que soportar! En realidad, los adultos solemos poner demasiadas expectativas en esos pocos días de descanso que tanto ansiamos después de un año de duro trabajo.  Ir con niños tiene algunas exigencias, pero su asombro y felicidad compensan largamente los cuidados y preocupaciones.  ¿Estás organizando tus vacaciones con los niños? Entonces esta nota es para tí.

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Dónde alojarse en unas vacaciones con niños

Cuando planificamos las vacaciones con niños, los primeros factores a tener en cuenta son el alojamiento y los servicios disponibles, dentro del estilo de vida de la familia, sus expectativas y posibilidades, y la edad de los niños.

• Camping: hay familias a las que les encanta el campismo y aún con niños muy pequeños cargan la caravana y se dirigen a alguno de los más de 1.100 campings y bungalows que hay en España.   Para encontrar un camping lo mejor es visitar la página de la Federación Española de Clubes Campistas, donde puedes consultar los campings por región o por tipo de vacaciones: mar, montaña, interior o bungalows.    Nuestras recomendaciones: asegurarse la disponibilidad de agua potable, servicios sanitarios y seguridad.  Con la diversión no habrá problemas: no solamente los niños pueden jugar con otros pequeños en el camping sino que el contacto con la Naturaleza ofrece mil oportunidades para descubrir, disfrutar y convertirse durante algunos días en pequeños exploradores.
• Hotelería: si la idea en estas vacaciones con niños es ir a un hotel, te recomendamos consultar si reciben niños antes de realizar la reserva.  Actualmente son muy populares las plataformas de alojamiento tipo P2P, que permiten alojarse en forma económica en residencias familiares; pero en este caso, es imprescindible asegurarse que el lugar es apto para niños.   La mayoría de los hoteles que reciben niños cuentan con promociones y ofertas especiales, como ofrecer sin cargo una cuna o cama pequeña en la habitación de los padres.  Otros hoteles cuentan con programas y espacios dedicados a los niños, pero es importante evitar que estos beneficios sean tan atractivos para los niños que impidan el disfrute en familia, el contacto con la Naturaleza y los momentos compartidos.  Nuestras recomendaciones: asegurarse la disponibilidad de servicios sanitarios y servicios de alimentación apropiados para niños.
• Hostels: son más económicos que los hoteles aunque también prestan menos servicios.  Hasta hace algunos años los hostels eran vistos como alojamientos casi exclusivamente para jóvenes mochileros, pero ya no es así.  En la actualidad los hostels reciben todo tipo de visitantes.  Muy convenientes si son vacaciones con niños no demasiado pequeños y padres jóvenes, ya que puedes ahorrar bastante y  vivir una experiencia diferente.  Nuestras recomendaciones: asegurarse de que reciben niños, disponibilidad de servicios sanitarios y alimentación apta para niños.

Dónde ir en unas vacaciones con niños

En realidad, si estamos dispuestos a disfrutar no solamente de las bellezas naturales y culturales que encontremos sino de pasar unos días en familia… ¡cualquier lugar es excelente!  En este sentido son importantes dos elementos: el transporte elegido y el ánimo o actitud con que estamos dispuestos a vivir cada experiencia.

• Compras: En la sociedad consumista en la que vivimos, los niños son un segmento muy codiciado, por eso en los sitios turísticos y temporada vacacional los niños son tentados constantemente desde los comercios con decenas de productos.  Sinceramente, si tuvieras que comprar todo lo que los niños son incentivados a pedir… ¡no quedaría dinero para las vacaciones! Aprende a decir “no” con amorosa autoridad, no temas un pequeño berrinche que no durará mucho tiempo, establece reglas claras respecto de las compras y cúmplelas tú también.
• Museos y atracciones culturales: Nunca los niños son demasiado pequeños como para aprender a visitar y disfrutar museos y atracciones culturales, y unas vacaciones con niños no estarían completas si no se visita algún museo.  Los museos más atractivos para los niños son los de ciencias naturales.  Evita la tentación de convertir la visita al museo en una clase de la Universidad; más bien, permite que los niños descubran por sí mismos y sólo responde cuando pregunten, con la mayor sencillez posible.  ¡Seguramente tú también tienes algo nuevo para aprender!
• Atracciones naturales: Los parques y reservas naturales y parques nacionales son uno de los grandes tesoros turísticos españoles y hay muchísimos motivos para visitarlos.  La mayoría son completamente accesibles para niños ya que cuentan con servicios para el visitante y senderos de dificultad baja, ideales para una caminata de descubrimiento de la Naturaleza.  Otra vez: evita dar demasiadas explicaciones, sólo responde cuando los niños pregunten y trata de ver la belleza que te rodea con ojos nuevos… como los de los niños.

Consejos finales

Como ves, si lo que prevalece es el buen humor y las ganas de pasar unos días en familia, no es tan difícil encarar unas vacaciones con niños.

Para finalizar queremos dejarte estos consejos imprescindibles que probablemente no encontrarás en otras guías de turismo, ya que surgen de la experiencia de haber pasado muchas vacaciones con niños:

• Toma en cuenta las necesidades alimentarias de los niños, como sus alimentos preferidos o alimentos no permitidos en el caso de niños celíacos o alérgicos.  Si se va a salir de excursión, llevar algo de comer en la mochila como frutas frescas o sandwiches.
• Si los niños toman algún tipo de medicamento, lleva una caja extra.
• Si se visitarán espacios naturales, llevar repelente de insectos y una buena provisión de agua potable. 
• Organizar las vacaciones de manera que todos puedan hacer algo que les gusta.  Debe haber momentos para los recorridos turísticos, pero también momentos para relajarse y, por ejemplo, dejarlos jugar con el dispositivo móvil.
• Establecer claramente las reglas respecto de los gastos.  Reserva dinero para los gastos extra como un juguete o un recuerdo del lugar visitado, pero establece qué día o momento se destinará a las compras.  Por ejemplo recordamos haber visitado en unas vacaciones con niños, un parque natural cuya tienda de recuerdos estaba por supuesto estratégicamente ubicada… ¡en la entrada del parque!  La solución fue declarar que iríamos a la tienda, pero al finalizar el recorrido.

Toma en cuenta nuestros consejos y felices vacaciones… ¡con niños!

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