Cuando hablamos de educación sexual nos referimos a la preparación de los seres humanos para asumir y enfrentar su roles en el sexo, la sexualidad y la salud sexual. Si bien los seres humanos utilizan el sexo con fines reproductivos, también las relaciones sexuales implican vínculos sociales, así como el goce del sexo por mero placer. Esto es una de las características que nos diferencia de otras especies.
Los seres humanos no estamos gobernados enteramente por los instintos ni mucho menos, algo que si ocurre en el resto de los animales. Sin embargo, la influencia de los instintos en nuestra sexualidad es notoria.
No obstante, como seres racionales que somos, necesitamos ser consientes sobre nuestra sexualidad y las consecuencias que sus prácticas pueden traer. Enseñar y educar a nuestros hijos en la responsabilidad que asumen ante el sexo y las relaciones sexuales es una labor que les corresponde a los padres, a las escuelas y a la comunidad en su conjunto.
Contenido
- 1 ¿Qué es la educación sexual?
- 2 Sexualidad, sexo, y salud sexual
- 3 ¿Qué aconsejan los expertos para hablar sobre educación sexual con tu hijo?
- 4 ¿A qué edad manifestamos nuestra sexualidad?
- 5 ¿Cuándo debe comenzar la educación sexual de tu hijo?
- 6 Internet, amigos, padres y educación sexual
- 7 Educación sexual en las diferentes etapas de la vida infantil
- 8 ¿Cuáles son los beneficios de la educación sexual?
- 8.1 Mejora la autoestima
- 8.2 Enseñarlos a que conozcan cómo enfrentar los cambios en su biología reproductiva
- 8.3 Los protege de agresores sexuales
- 8.4 Prepara a los jóvenes para una actitud responsable ante la sexualidad
- 8.5 Embarazos no deseados, una consecuencia de la falta de educación sexual
- 8.6 Enfermedades de transmisión sexual
- 8.7 Responsabilidades y consecuencias ante el sexo
¿Qué es la educación sexual?
La educación sexual es el conjunto de actividades educativas que enseñan al individuo acerca de la sexualidad humana, del sexo y la salud sexual. Esta educación es válida para todas las etapas de la vida y abarca conocimientos sobre:
- Anatomía, biología y fisiología del aparato reproductor masculino.
- Características anatómicas y fisiológicas del aparato reproductor femenino.
- La orientación sexual y sus implicaciones.
- Desarrollo de la sexualidad en las diferentes etapas de la vida.
- Las relaciones sexuales y sus consecuencias.
- El uso de anticonceptivos, características de cada método.
- Los derechos sexuales y reproductivos.
- Los estudios de género y la aceptación de la diversidad.
La Organización Panamericana de Salud considera que “más que la adquisición de conocimientos, la educación sexual debe promover un pensamiento abierto sobre el sexo y su terminología con el objetivo de desarrollar actitudes positivas hacia el sexo, la sexualidad y la salud sexual“.
Sexualidad, sexo, y salud sexual
Para poder enfrentar las labores de la educación sexual es conveniente familiarizarte con algunos términos que son muy empleados en este campo y te serán de gran ayuda para enfrentar esta compleja y sensible labor.
Sexualidad
La sexualidad abarca un conjunto de comportamientos que están encaminados a satisfacer la necesidad y el deseo sexual. Los aspectos biológicos de la sexualidad están básicamente definidos por los componentes genéticos, la estructura de los órganos genitales y la capacidad de la procreación.
Por su parte las posibilidades de encuentro entre dos personas ya sea para brindarse placer o para asumir en forma libre, consiente y responsable la creación de un nuevo ser, trae aparejada una serie de circunstancias y factores complejos que son propios de la privilegiada condición de los seres humanos.
Según la Organización Mundial de la Salud, la sexualidad “es un aspecto central del ser humano, presente a lo largo de toda su vida. Abarca al sexo, las identidades y los papeles de género, el erotismo, el placer, la intimidad, la reproducción y la orientación sexual”.
El Departamento Nacional de Salud de los Estados Unidos de América, considera que: “La sexualidad es una aspecto fundamental del ser humano. El amor, el afecto y la intimidad sexual todos juegan papeles importantes en las relaciones sexuales sanas, también contribuyen al bienestar del ser humano”.
El creador del psicoanálisis Sigmund Freud, decía que “en la sexualidad de las personas está incluido el amor en un sentido amplio, tal como lo hablan los poetas”.
Entre las características que distinguen la sexualidad en el humano se encuentran: el erotismo, la necesidad de privacidad, la búsqueda de placer y el carácter personal del deseo que se expresa de distintas maneras y mediante diferentes formas. Hablar de sexualidad implica hablar de afectos, sensaciones, emociones, sentimientos y significados, entre otros.
¿Qué es el sexo ?
La respuesta a esta pregunta dependerá de quien de la respuesta pues tiene una connotación diferente para biólogos, médicos, psicólogos, religiosos o desde otros puntos de vista.
La mayoría responderá que lo determinan los genitales y son parte de la reproducción de la especie humana. Otros consideran que el mayor órgano sexual que existe es el cerebro porque está muy interrelacionado con los sentimientos y con las emociones.
Para muchas personas y especialistas el sexo solo incluye el coito o acto sexual con la penetración del pene en la vagina. Otros consideran que incluye el sexo anal, oral y la masturbación. Muchos consideran que todo tipo de contacto físico que produce placer al cuerpo o deleite carnal es parte del disfrute del sexo.
Como te puedes dar cuenta no existe una única definición de sexo, pero la mayoría de los expertos consideran que el concepto siguiente de salud sexual, abarca los aspectos básicos del sexo y por tanto es más aceptado mundialmente.
Salud sexual
La Organización Mundial de la Salud (OMS) la define como: ” La salud sexual es un estado de bienestar físico, emocional, mental y social en relación con la sexualidad. Requiere un enfoque positivo y respetuoso de la sexualidad y de las relaciones sexuales, así como la posibilidad de tener experiencias sexuales placenteras y seguras, libres de toda coacción, discriminación y violencia. Para obtener y mantener la salud sexual, los derechos de las personas deben ser respetados y protegidos”.
Esta Organización así como la UNICEF, y otros organismos consideran que el tema de la salud sexual tiene grandes implicaciones en el disfrute sano de la sexualidad sin atavismos, ni coacciones.
¿Qué aconsejan los expertos para hablar sobre educación sexual con tu hijo?
Hablar de sexualidad con nuestros hijos no resulta un tema fácil. De hecho, la mayoría de los padres eluden conversar sobre este tema tanto como les resulta posible. Esto por supuesto es un error, pues no existe lugar más apropiado para aprender sobre la sexualidad que el entorno familiar.
Es precisamente la familia quien debe iniciar la educación sexual del niño, sin embargo muy frecuentemente esto no es así y la mayoría de las informaciones le llegan a los niños y jóvenes por su entorno. Más a través del grupo de amistades, los medios de comunicación y las instituciones escolares que de sus padres o familiares.
A los padres les resulta difícil establecer una línea clara entre los temas que abarca la sexualidad y consideran algunos como un “tabú”. Lo cierto es que mientras mayor sea el nivel informativo que posean nuestros hijos, estarán más seguros y serán más consientes a la hora de tomar cualquier decisión relacionada con su sexualidad.
Es cierto que la sexualidad es muy compleja, pero en esta materia no pueden existir tabúes, ningún tema puede estar vedado. Depende de nuestra inteligencia el que seamos capaces de establecer una comunicación clara que sirva para educar correctamente a nuestros hijos.
No olvides que hablar del sexo no se trata de una sola conversación sino de un aprendizaje que compartirás con tu niño durante sus distintas etapas de crecimiento. Los expertos sugieren que puedes comenzar por conversar sobre las partes privadas de su cuerpo.
¿A qué edad manifestamos nuestra sexualidad?
La sexualidad está presente en todas las etapas de la vida. Nacemos como seres sexuales y este es un hecho que nos acompaña desde el mismísimo nacimiento. Manifestamos nuestra sexualidad desde que nacemos. No obstante, podemos identificar ciertas etapas que son fundamentales en el desarrollo:
De 0 a 1 años
El recién nacido tiene vinculada su sexualidad a la relación con sus padres, relación que será la fuente de vivencias y sensaciones que el niño necesita en esta etapa.
De 1 a 3 años y medio
En esta etapa los niños ya experimentan sensaciones de placer al controlar los esfínteres, es entonces que empiezan a conocer su cuerpo. Van entendiendo que es lo que necesitan y aquello que les resulta placentero.
De 3 años y medio a 6 años
En esta etapa los niños comienzan a explorar el mundo y a descubrir su propia sexualidad. A esta edad es normal que el niño sienta una fuerte atracción física hacia el progenitor del sexo opuesto o hacia el del mismo sexo. Esto se conoce en psicoanálisis como Complejo de Edipo, en el caso de los niños varones, o Complejo de Electra, en el caso de las niñas. De igual modo, en esta etapa los niños y las niñas son capaces de identificar su propio sexo.
De 6 a 9 años
Esta es la etapa en que comienza a acercarse la pubertad, un proceso que implica numerosos cambios físicos y por medio del cual el cuerpo del niño o niña llegará a convertirse en adolescente y estará apto físicamente para la reproducción sexual. En esta etapa se despierta el interés sexual por conocer el cuerpo propio, especialmente los órganos sexuales.
Así mismo se inician los juegos sexuales, ya sean entre miembros de ambos sexos o entre miembros del mismo sexo. Estos juegos sexuales constituyen un elemento clave para la formación de la identidad sexual y serán vistos de un modo u otro en dependencia de los valores que profese la sociedad y la familia sobre la sexualidad humana.
De 10 a 18
En esta etapa comienza la llamada adolescencia, un periodo en el desarrollo biológico, psicológico, sexual y social inmediatamente posterior a la niñez y que comienza con la pubertad.
Con la llegada de la adolescencia, las hormonas sexuales se activan y comienzan a producirse cambios físicos y psicológicos. El cuerpo experimenta un crecimiento acelerado, al tiempo que surgen cambios corporales, sobre todo de índole sexual.
En esta etapa las niñas ven crecer sus caderas y senos, comienza a salir el vello púbico y la figura en general se vuelve más estilizada. En el caso de los niños se producen cambios en la voz, crecen los genitales e igualmente les sale el vello púbico.
¿Cuándo debe comenzar la educación sexual de tu hijo?
La Academia Americana de Pediatría (AAP por sus siglas en inglés) establece que es recomendable hablarle a los niños del sexo desde edades muy tempranas, tan pronto sea capaz de ver, escuchar y entender el mundo que tiene a su alrededor.
Solo tú determinarás a qué edad debes hablarle del sexo a tu niño. Lo más importante es tener en cuenta si el niño tiene la capacidad para entender. Los especialistas en sexualidad infantil consideran que cuando el niño comience a efectuar preguntas relacionadas con el sexo es el momento ideal para ir sembrando los conocimientos sobre la educación sexual.
Lo ideal es que todas las dudas sobre el sexo y la sexualidad puedan ser explicadas por los padres, será una información muy valiosa que le servirá al niño para su propia experiencia sexual durante toda su vida.
Todos los momentos son buenos para abordar este tema, aprovecha cada oportunidad para explicarle y discutir sobre sexo, sexualidad y salud sexual. No le tengas miedo a lo escabroso de este tema, con confianza, sinceridad y preparación podrás ser el mejor maestro para tu hijo.
Internet, amigos, padres y educación sexual
El tema de la sexualidad y el sexo debe ser abordado de forma muy natural por los padres, no es necesario esperar a que lo conozca por las amistades, por la televisión o por internet. Prepararlos para que puedan identificar cuando podrían ser objeto de una agresión sexual es una de las tareas fundamentales en la primera etapa de la vida. Recordar que muchos agresores sexuales son conocidos de la familia y que podrían jugar con la inocencia de nuestros pequeños.
Hoy las posibilidades de acceso a la tecnología permiten que niños muy pequeños que no tengan la supervisión adecuada puedan tener información sobre temas extremos.
En la última Encuesta Nacional de Salud Sexual efectuada en España, se encuestaron a casi 10 000 personas, preguntándole: ¿A través de quien le hubiese gustado recibir información acerca de la sexualidad? Las respuestas dieron como primera opción a la familia, después a los profesores y al personal sanitario por orden de preferencia. Las mujeres prefirieron que fuera la madre (58,3%) y los hombres los padres (35,6%).
Estos deseos no se corresponden con la realidad, que demuestran que las vías de información más frecuentemente utilizadas por los adolescentes son internet y los amigos.
Educación sexual en las diferentes etapas de la vida infantil
Como previamente señalamos cada niño requiere de un traje a la medida para la transmitir las nociones básicas de educación sexual. Pero hay algunas etapas de la vida del niño que van marcando su desarrollo y de acuerdo al mismo, debes de proporcionarle los criterios básicos en materia de sexualidad, sexo y salud sexual.
Entre 18 meses y 3 años
Cada parte del cuerpo tiene su nombre, así que también los genitales tienen su nombre, es tan normal como si fuera un brazo o una pierna. No le inventes nombres porque lo confundirás. Es momento de enseñarle que los genitales son partes privadas y que no deben ser vistas por otros.
Entre 4 y 5 años
En esta etapa es lógico que tu niño muestre más interés por las diferencias entre un sexo y otro. Pueden hacer preguntas relacionadas con las diferencias entre los aspectos básicos de los genitales de niños y adultos, sobre el tamaño de los pechos, de donde provienen los bebés, entre otras muchas inquietudes. Todas son normales y lógicas porque va descubriendo y haciéndose parte de su entorno.
Es la mejor edad para transmitirle la importancia de no mostrar sus genitales y que estar desnudo en público no es correcto. También a esta edad le debe alertar sobre la importancia de que nadie toque sus partes íntimas. En esto incluir a amistades, conocidos y todos los familiares con excepción de médicos y enfermeras.
Entre 5 y 7 años
Sus inquietudes se hacen más difíciles de comprender y por tanto tendrá numerosas interrogantes y si no encuentra la respuesta adecuada puede llegar a conclusiones erradas.
Siempre decirle la verdad y adecuar el lenguaje a lo que pueda comprender a esa edad. Trate de proporcionarle las respuestas que el necesita y no tener que acudir a otras fuentes de información.
Entre 8 y 12 años
Estas edades son determinantes para su vida sexual posterior, es el mejor momento para hablarle de la pubertad y de los cambios que tendrá que enfrentar. La importancia de esperar para iniciar su actividad sexual, que son los métodos anticonceptivos y las enfermedades de transmisión sexual.
Puede preocuparle el tamaño de su pene, o el de los pechos en el caso de las chicas. Puedes contarle de tus propias experiencias y como tuviste tu primera menstruación o cuando comenzaron las erecciones y poluciones nocturnas en el caso de los padres.
En esta etapa se despliegan con todo su esplendor las preguntas sobre las preferencias sexuales y el por qué se aman parejas del mismo sexo y otras muchas interrogantes sobre este tema.
Entre los 12 y 18 años
La madurez sexual unida a la inmadurez psicológica no es la mejor de las mezclas. Es precisamente por ello que la educación sexual resulta tan importante cuando se llega a esta edad. Un adolecente bien informado es menos propenso a cometer errores, sobre todo si estos pueden acarrear serias consecuencias para su vida o su salud.
Cuando nuestros hijos alcanzan la madurez sexual es preciso que tengan toda la información que van a necesitar. Esta es la única manera que tenemos de lograr que consigan una salud sexual y reproductiva plena.
¿Cuáles son los beneficios de la educación sexual?
Si tu hijo está bien informado sobre todos los temas de sexualidad, sexo y salud sexual pues tendrá más posibilidades de enfrentar una vida sexual responsable y no tener que asumir riesgos ante situaciones inesperadas. Pero además hablar de estos temas con tu hijo ayuda a una mayor compenetración y comunicación para lograr convertirte en su mejor amigo.
Mejora la autoestima
Contribuye a fomentar su autoestima porque está consciente de su propia evolución, del respeto que se merece y de cómo protegerse para tener una vida sexual plena durante su vía. La educación sexual de calidad ayuda a tomar decisiones más responsables y con menos riesgos.
Enseñarlos a que conozcan cómo enfrentar los cambios en su biología reproductiva
La adolescencia es una etapa de grandes cambios físicos, emocionales y psicológicos. Estar preparados para enfrentarlos con conocimiento y dominio de todas sus implicaciones les garantiza una gran confianza. No caminan hacia lo desconocido, saben lo que les espera y como enfrentar los retos de esta maravillosa y compleja etapa de la vida.
Los protege de agresores sexuales
Inculcarle los conocimientos sobre el sexo, la intimidad y los valores los ayuda a poder valorar mejor por ellos mismos lo que es conveniente y no. Los alerta para evitar las agresiones sexuales.
También contribuye a que no vean el sexo como algo pecaminoso, ni que les desarrolle ansiedad.
Prepara a los jóvenes para una actitud responsable ante la sexualidad
Estudios desarrollados en cuatro universidades españolas encontraron que el 62% han sido objeto de prácticas de violencia psicológica como control y humillación. La educación sexual los capacita para que conozcan los riesgos de salud, emocionales, físicos y psicológicos del sexo.
Embarazos no deseados, una consecuencia de la falta de educación sexual
Los embarazos no deseados es uno de los problemas que en ocasiones acarrea el tener relaciones sexuales sin la debida protección. Un embarazo en edades tempranas interrumpe los estudios, el desarrollo profesional y otras aspiraciones personales.
Por otra parte los embarazos en edades tempranas implican más riesgos para la madre y el feto. Se estima que en España entre el 60 y el 90% de los embarazos que se producen antes de los 19 años son embarazos no deseados.
Enfermedades de transmisión sexual
En España los jóvenes entre 15 y 24 años aportan el 50% de los casos diagnosticados anualmente con enfermedades de transmisión sexual y se estima que un 25% será portador del virus del papiloma humano.
Responsabilidades y consecuencias ante el sexo
Preparar a tu hijo para lo que representa ser sexualmente activo es una gran responsabilidad que tienen los padres en primer lugar. Diferentes estudios demuestran que la experiencia que se tenga durante la primera vez repercutirá en la vida sexual en su etapa adulta.
Prepararlo en los beneficios y los peligros del sexo, hará que su hijo pueda disfrutar de una manera más plena el amor, el romance, la intimidad, la complicidad y el placer sexual. Todo lo relacionado con el sexo y la sexualidad tiene aristas misteriosas y no debe ser un tema para abordarlo con tapujos y medias tintas.
La educación sexual de tu hijo debe ser un tema cotidiano, es un tema que nunca acaba, debes dejarle espacio para que pregunte, y seas tú el que lo guie en ese mundo que comenzará a experimentar, lleno de desafíos, pero también de encantos.
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