Cada semana te acerca al ansiado día… y desde Canal Chupete te hemos acompañado hasta la semana 35 de embarazo. Ya tu hijo está casi completamente desarrollado y maduro. Será capaz de respirar y alimentarse por sí mismo en su vida extrauterina. Pero cuanto más esté en tu útero mejor será para él, para su salud y bienestar futuro.
Tu hijo ya comenzó a engordar y a acumular grasa subcutánea y carbohidratos en el hígado, tendrá menos espacio para moverse, ejercerá mayor presión sobre tus órganos internos y el sistema vascular. Comenzará a descender para irse acomodando en el canal del parto. Todo lo anterior te ocasionará molestias e impaciencia, pero la cercanía del parto y la llegada de un bebé saludable las resarcirá con creces.
Contenido
- 1 El desarrollo del feto en la semana 35 del embarazo
- 2 ¿Y a que se enfrenta la mamá en la semana 35 de embarazo?
- 3 Y a las 35 semanas de embarazo ¿ cuáles son los exámenes y pruebas recomendadas?
- 4 Malestares y complicaciones de la semana 35 de embarazo
- 5 Algunas recomendaciones para la semana 35 de embarazo
- 5.1 Para reducir la inflamación y los calambres en la semana 35 de embarazo
- 5.2 Para aliviar los dolores osteomusculares en la semana 35 de embarazo
- 5.3 Máxima atención a tu alimentación y ganancia de peso en la semana 35 de embarazo
- 5.4 Inevitables las micciones frecuentes en la semana 35 de embarazo
- 5.5 Tu hijo sobrevivirá a un parto pretérmino en la semana 35 de embarazo
- 6 Descanso y actitud positiva dos claves para un parto feliz
- 7 Sabías que… en la semana 35 del embarazo…
- 8 También es importante en las 35 semanas de embarazo…
El desarrollo del feto en la semana 35 del embarazo
Cuando el feto llega a las 35 semanas del embarazo tiene un desarrollo prácticamente completo. En esta etapa su peso es de alrededor de 2 400 gramos (5 libras y 5 onzas) y mide entre 45 y 47 centímetros (entre 18-19 pulgadas). Su peso puede oscilar entre 2 050 y 3 210 gramos y sigue siendo normal.
El feto de 33 semanas o sea 35 semanas de embarazo irá acumulando grasa en todo su cuerpo y en especial alrededor de sus hombros. Engordará entre 226 a 340 gramos (8 a 12 onzas) por semana. La osificación de los huesos largos y el tono muscular también aumenta.
Los órganos desarrollados y funcionando en la 35ava semana de embarazo
En esta semana los órganos fundamentales han completado su desarrollo. Los pulmones han madurado y pueden enfrentar los cambios fisiológicos que impone la vida extrauterina con muy pocas posibilidades de complicaciones. El desarrollo de los alvéolos, la pared torácica y la producción de surfactante pulmonar (sustancia básica para que los alvéolos de los pulmones no se peguen) le permiten al feto efectuar los movimientos respiratorios básicos en su nueva etapa fuera del útero.
El hígado de tu bebé ya acumula reservas de glucógeno. Los riñones están completamente desarrollados. La movilidad del tracto gastrointestinal mejora y los testículos descienden desde el interior de la cavidad abdominal hasta los sacos escrotales. Los labios menores de las niñas aumentan de tamaño.
El mayor órgano del cuerpo humano es la piel
La piel el órgano mayor del ser humano adquiere un color rosado durante las 35 semanas de embarazo y ha completado su maduración. Ya puede servir de barrera protectora en su mundo extrauterino, es capaz de sudar, lubricarse y posibilitar el crecimiento del vello. La uñas crecen y llegan hasta la punta de los deditos.
El feto es capaz de detectar luminosidad, sonidos y sentir dolor
Desde las 22 semanas el feto es capaz de sentir dolor. La audición está desarrollada en un feto de 35 semanas de embarazo, detecta sonidos maternos de origen vascular como los latidos aórticos y también intestinales. Es capaz de disfrutar de la música externa y de reconocer la voz materna y sonidos que le resulten familiares.
Mientras el bebé va ganando peso de forma sostenida el iris es de color azul porque todavía no acumulan la melatonina que se necesita para que adquieran su color definitivo, lo que no ocurrirá hasta meses después del nacimiento. No obstante ya en la semana treinta y cinco de embarazo, sus ojos son capaces de detectar la luz y reaccionan ante periodos de luminosidad y oscuridad.Se lleva el dedo a la boca y lo succiona, pero ahora está presente el reflejo de succión-deglución y por eso ya sería capaz de alimentarse por la vía oral fuera del útero.
Un crecimiento impresionante de su sistema nervioso
El cerebro y la cabeza del futuro bebé ya tienen en la semana 35 de embarazo el mismo tamaño que tendrán en el momento de su nacimiento. Así las cosas, durante el resto del embarazo ya su cabeza no crecerá más. Este es un hecho lógico, habida cuenta de que para salir al exterior, su cabeza tiene que pasar por el canal vaginal durante el parto. Pero esa cabecita que pasará por tu vagina ha desarrollado más de 100 billones de neuronas las que tienen más de 100 trillones de conexiones…sin dudas algo prodigioso.
El sistema neurológico del feto en la embarazada de 35 semanas se ha desarrollado tanto que según demuestran diversos estudios presenta movimientos oculares rápidos (fase REM) en varios momentos. Estos movimientos se desarrollan en la etapa correspondiente a los sueños. El comportamiento del feto en la semana 35 es cada vez más estructurado, definiéndose los ciclos de sueño y vigilia. Por ello se afirma que el feto puede soñar mucho antes de nacer. Claro, que lo que sí resulta imposible – al menos por ahora -es conocer los sueños del feto.
¿Y a que se enfrenta la mamá en la semana 35 de embarazo?
Cuando como futura mamá arribes a la semana 35 del embarazo comenzarás a sentir en la parte inferior pelviana una presión mayor. Esto es producto de que el bebé se encuentra ubicándose en posición-normalmente cefálica- y su cabeza se sitúa entre los huesos de la pelvis. Tu bebé se está preparando para atravesar el canal del parto.
A las 35 semanas de embarazo, el útero materno habrá aumentado nada más y nada menos que unas 15 veces su tamaño original y puede llegar hasta por debajo de las costillas inferiores. Lo anterior motiva que la respiración sea más dificultosa y puedas experimentar sensación de falta de aire y deseos de orinar frecuentemente porque tu vejiga está muy comprimida.
Tu ombligo se volverá cada vez más sobresaliente, pero esto es motivado por la distensión del vientre y la buena noticia es que se recuperará luego del parto. Así que no te inquietes eso es una característica completamente normal.
Molestias osteoarticulares muy frecuentes
Tus movimientos se harán más lentos, ocurriendo una especie de balanceo durante la marcha para poder mantener el centro de gravedad del cuerpo que sufre un desplazamiento por el crecimiento del abdomen y el aumento de peso. También puede ocasionar dolores en la espalda. Los ligamentos comienzan a distenderse para facilitar que la pelvis responda al trabajo de parto y esto puede ocasionar molestias en las articulaciones y favorecer las caídas.
Calambres y otras molestias circulatorias
Puedes sentir calambres y otras molestias circulatorias. También sentirás sensación de crecimiento, inflamación y aumento de tamaño de la vagina y de la vulva. Es absolutamente natural y no debes alarmarte ante ninguno de estos síntomas, que son propios durante esta etapa del embarazo.
Contracciones de Braxton Hicks
Otra sensación a la que te debes enfrentar son las llamadas contracciones de Braxton Hicks, pues son encogimientos o calambres por el aumento de tamaño del útero y no se corresponden propiamente con un trabajo de parto. No debes confiarte y lo ideal en estos casos es estar al tanto y no preocuparte sin motivos.
Y a las 35 semanas de embarazo ¿ cuáles son los exámenes y pruebas recomendadas?
Ya es momento para ultimar detalles, realizar exámenes y asegurar que tu salud y la del feto sean óptimas para tener un parto satisfactorio y acariciar en tu pecho al mayor regalo de la naturaleza.
Cuando llegas a esta semana es conveniente que te practiquen un cultivo recto-vaginal, que ayuda a descartar la existencia de estreptococo del grupo B. Estos microrganismos que no causan normalmente síntomas clínicos en la embarazada pueden ser muy peligrosos para tu bebé, si los adquiere en el momento del parto. Ellos en el recién nacido pueden ser causa de neumonía, meningitis o infecciones en la sangre.
Esta prueba no es dolorosa, no produce molestias. Solo se pasa un palito por la vagina y el recto y se efectúa el cultivo microbiológico. Cuando es positiva se previenen las posibles complicaciones mediante un tratamiento con antibióticos la mayoría de las veces por vía endovenosa durante el parto.
También a las 35 semanas de embarazo, es el momento de efectuarse el chequeo antes del parto y estar preparada por si es requerido o desea emplear anestesia. Por lo general se incluyen pruebas de coagulación de la sangre y electrocardiograma.
Es importante en esta etapa realizar visitas a la consulta de tu médico, de preferencia con frecuencia semanal, para hacer un seguimiento de los signos vitales tuyos y de tu bebé, así como controlar sus niveles de vitalidad.
Malestares y complicaciones de la semana 35 de embarazo
En esta semana, es normal que experimentes algunos malestares. Uno de los más frecuentes es la sensación de falta de aire. Esto sucede porque al estar comprimido el diafragma (músculo que separa los pulmones del abdomen) reduce la cantidad de aire que se puede inspirar y puede ocasionarte esta sensación.
Otra de las molestias comunes es la inflamación en los tobillos, los pies, las piernas, en sentido general se reflejan en las extremidades inferiores, por ser estas sobre las que recae el peso del cuerpo. Junto a la inflamación pueden aparecer los calambres, que se perciben con un mayor o menor grado de intensidad.
Durante esta etapa de tu gestación notarás cambios en tu forma de caminar, con cierto balanceo de un lado hacia otro para mantener el equilibrio. Esto está determinado sobre todo porque el cartílago blando de la pelvis comienza un proceso de expansión para facilitar que tu bebé pase por el canal vaginal de una manera más fácil en el momento del parto. Esto es facilitado por la acción de la relaxina, que actúa relajando los ligamentos articulares. Esto también provoca mayor laxitud e inestabilidad en las articulaciones lo que acarrea molestias.
El aumento de peso y del vientre ejerce presión sobre los discos lumbares de la columna en la parte baja de la espalda y puede provocar ciática y dolor de espalda.
Otros malestares
Como ya conoces en las 35 semanas de tu embarazo ya el tamaño de tu útero ha aumentado considerablemente, por este motivo todos tus órganos se encuentran presionados por el bebé, sientes presión en la vejiga por lo que vas al baño frecuentemente.
En la medida que pasa el tiempo puedes tener acidez y problemas digestivos, caracterizados por acumulación de gases, náuseas, diarreas o estreñimiento. No debes alarmarte, pues todos estos síntomas pasarán
luego de que de nazca tu bebé. Puedes tener también hemorroides y venas varicosas, sangrado en las encías y manchas en la piel.
Algunas recomendaciones para la semana 35 de embarazo
Los cuidados varían de acuerdo a las características de cada embarazo y las necesidades pueden ser diferentes de una mujer a otra. En sentido general para protegerte, cuidarte y asimilar de forma positiva los cambios propios de tu estado, puedes seguir estos consejos:
Para reducir la inflamación y los calambres en la semana 35 de embarazo
Si tienes inflamación en las piernas o en los tobillos lo idóneo es mantenerlos en alto cuando descanses y no es conveniente permanecer mucho rato de pie de forma continuada, ni realizar caminatas muy prolongadas. Es de gran utilidad hacer reposo y descansos frecuentes.
Para evitar los molestos calambres es recomendable que hagas pequeñas caminatas diarias y realices movimientos rotatorios con los tobillos. La aplicación de calor o masajes también puede resultar muy beneficiosa.
Utiliza ropa cómoda y evita todo vestuario, incluidos calcetines o ropa interior, que te ocasionen presión.
Para aliviar los dolores osteomusculares en la semana 35 de embarazo
Para evitar o aliviar los dolores en la espalda, evita mantenerte en la misma posición durante períodos prologados de tiempo ya sea que te encuentres de pie o sentada.
Si debes permanecer mucho tiempo sentada, lo mejor es el uso de una silla diseñada ergonómicamente y ajustable. Es conveniente que tenga apoyo para la zona lumbar y para los pies. Haz la prueba a sentarte correctamente, apoyando la espalda bien derecha sobre el respaldar del asiento. La postura ideal está determinada por orientar la cabeza y la columna vertebral de forma lineal, relajar los hombros y de esta forma evitar las contracturas y las tensiones musculares.
Alterna las posturas, si debes estar sentada párate frecuentemente. Evita cargar pesos, pero de tener que hacerlo flexiona ligeramente las rodillas, porque esto puede ocasionar lesiones en la zona lumbar de la columna vertebral.
Debes además caminar con una ligera separación entre los pies para mantener mejor el equilibrio, lo que te ayudará a que al caminar sientas menor cansancio. Muévete lentamente y evita los movimientos bruscos.
Máxima atención a tu alimentación y ganancia de peso en la semana 35 de embarazo
Si tu aumento de peso durante el embarazo no ha superado la media de entre 9 a 15 kg, puedes darte el lujo en este período de aumentar el consumo diario de calorías entre unas 200-300 diarias. La dieta te debe aportar unas 2 750 calorías diarias. Como tu estómago está comprimido, en lugar de comer abundante en una sola comida, come con frecuencia pequeñas porciones. En al menos 5-6 comidas diarias.
Inevitables las micciones frecuentes en la semana 35 de embarazo
Puede ser que no puedas contener el orine y tengas que acudir muy frecuentemente al baño o no tener el control necesario de la vejiga cuando ríes, toses o estornudas. Nunca trates de resolver esto dejando de tomar líquidos porque la hidratación es muy importante para tu hijo y para ti. Vacía la vejiga completamente y frecuentemente y programa tus idas al baño, practica los ejercicios de Kegel y si no te queda más remedio usa compresas.
Tu hijo sobrevivirá a un parto pretérmino en la semana 35 de embarazo
En el caso de un parto pretérmino, puedes estar tranquila: a partir de esta semana ya no es necesario detenerlo, ni usar medicamentos para acelerar la maduración de los pulmones. El bebé ya puede sobrevivir sin ningún tipo de contratiempos, al estar completamente formado. En lo adelante sólo resta que aumente progresivamente de tamaño y de peso.
Estos son sólo algunos consejos que puedes tener en cuenta y esperamos te sirvan de ayuda, pero existen otros específicos en dependencia del malestar que experimentes que tu obstetra, sin duda, te puede orientar.
Descanso y actitud positiva dos claves para un parto feliz
Cuando tienes 35 semanas de gestación, lo que es equivalente a llegar a los 8 meses de embarazo, ya te encuentras en la recta final de la gestación y debes prepararte para el parto.
Se acerca el gran acontecimiento, y es normal que sientas algún temor y ansiedad. Por ello es recomendable que descanses todo el tiempo que te sea posible durante el transcurso del día, mantener una actitud positiva y vivir estas semanas de espera como una de las etapas más felices de tu vida.
Tener pensamientos positivos a la hora de dormir te ayudará a conciliar el sueño y tener un descanso reparador. También puedes practicar ejercicios de auto relajación. Una pequeña sugerencia: coloca bolsitas de agua tibia en tu lecho para aliviar los dolores torácicos o pelvianos y así lograr conciliar el sueño con las menores molestias posibles. Otra opción es recurrir a los cómodos almohadones de embarazadas, que de acuerdo a tus gustos y preferencias harán más placenteras tus horas de reposo.
Evita estar acostada boca arriba durante periodos prolongados porque se puede producir una compresión de la vena cava. Esto puede provocar una bajada de la presión arterial y sensación de mareo. Es recomendable que descanses acostada de lado.
Son frecuentes los olvidos con todas las preocupaciones al mismo tiempo, así que haz una lista de todo lo pendiente que te ayudará a que nada pase por alto.
Lo más importante en estos momentos es mantener la calma, con la satisfacción de que en breve podrás tener entre los brazos a tu bebé.
Sabías que… en la semana 35 del embarazo…
En esta última etapa de tu gestación es bastante probable que te entusiasmes y te excedas en tus actividades. Te recomendamos que no lo hagas, es mucho mejor mantener la mesura para conservar las fuerzas y la energía que luego necesitarás durante el parto. Recuerda que debes preparar la ropa y otros objetos de primera necesidad para el hospital y la llegada a la casa.
Tu bebé puede ser que ya bastante pelo y haya desaparecido la mayoría del vello o lanugo. Este se forma durante el desarrollo del feto, y cae de la piel para quedar en el líquido amniótico. Desaparece en esta etapa para dar paso al pelo del bebé.
Trata de no someter a tu pequeñín a una música estridente ya que el cerebro es inmaduro y puede que se estimule demasiado. Lo que mejor aceptará es la música clásica suave con cadencia rítmica ondulante.
Si te preocupa que durante todo un día no hayas sentido los movimientos de tu bebé, ensaya dándote unos golpecitos suaves con la mano en el abdomen. Si no sientes ninguna respuesta pues sería bueno que te comunicaras con tu médico.
En esta semana ya es conveniente que guardes los anillos y los piercing que normalmente usas. Recuerde que en este mes es normal que retengas líquido y de no retirar las prendas a tiempo, te será mucho más difícil posteriormente.
También es importante en las 35 semanas de embarazo…
Es un momento muy especial en la relación de la pareja, si el papá va a estar contigo durante el parto explícale todo lo que esperas de él. Sentir su apoyo te ayudará a tener menos preocupaciones. Si el embarazo es normal aprovecha para hacer más fuerte la comunicación y las muestras de cariño con tu pareja, nada está prohibido solo ser más creativos y encontrar las formas más adecuadas de expresar el amor y la comprensión mutua.
Es momento de que sean los demás quienes trabajen por ti, mientras acumulas fuerza y te preparas mentalmente para el proceso del parto. Cuida tu cuerpo, mantente informada, garantiza tu salud y la de tu bebé y ten pensamientos alegres y positivos acorde con la felicidad de tener un nuevo miembro en la familia.