El sexo durante el embarazo, al igual que todos los aspectos relacionados con la sexualidad y la intimidad de la pareja, obedecen ante todo a decisiones personales. Cuando estas embarazada además del deseo y el placer que experimentes en las relaciones sexuales, es necesaria una evaluación médica de la condición de tu embarazo para asegurar que es saludable y que no hayan factores de riesgo asociados.
El sexo durante el embarazo como en muchos otros aspectos relacionados con la sexualidad, obedece ante todo a las preferencias y deseos de la pareja. Hay mujeres que se sienten más atractivas durante el embarazo, experimentan más deseos de tener sexo y se sienten más seguras. Otras por el contrario sienten temores y preocupaciones por su posible efecto sobre el desarrollo exitoso del embarazo. Sobre estas y otras muchas dudas tratará esta página.
Contenido
- 1 ¿Qué relación hay entre los cambios y el sexo durante el embarazo?
- 2 ¿Por qué es seguro tener relaciones sexuales durante el embarazo sano?
- 3 Algunos beneficios de tener sexo durante el embarazo
- 4 ¿Cómo se comporta el apetito sexual durante el embarazo?
- 5 ¿Y qué piensan los hombres del sexo durante el embarazo?
- 6 ¿Hay cambios en la libido de la mujer durante el embarazo?
- 7 ¿Cuáles son las posiciones para el contacto sexual con penetración para el sexo durante el embarazo?
- 8 Sobre el sexo oral y anal, durante el embarazo…
- 9 ¿Cuándo no es conveniente tener sexo durante el embarazo?
- 10 ¿En cuánto tiempo después del parto podré tener relaciones sexuales?
- 11 Y una recomendación final…
¿Qué relación hay entre los cambios y el sexo durante el embarazo?
Durante el embarazo aumenta el flujo sanguíneo en la parte inferior del abdomen, esta llegada de sangre adicional facilita que una mujer embarazada tenga más irrigación en la vagina. Lo anterior facilita que una mujer embarazada sea más sensible a la estimulación y por tanto pueda hasta experimentar orgasmos múltiples. Durante la gestación se pueden ganar alrededor de 3 libras de sangre adicionales.
Por otra parte cuando se produce la gestación se desencadenan una serie de cambios hormonales, que hacen a la mujer experimentar la sensación de sentirse más atractivas y tener más deseos sexuales. Las mamas crecen y se ponen turgentes que acrecientan la sexualidad.
Entre los cambios que experimenta la mujer durante su actividad sexual se evidencian modificaciones en las cuatro fases. En la fase de excitación experimentara mayor lubricación vaginal. Las sensaciones vaginales se incrementan porque los tejidos abdominales y la vulva se estiran para adaptarse al nuevo peso y volumen del útero.
Los niveles de excitación sexual durante la fase de meseta se mantienen e intensifican. Esto prepara las condiciones para el orgasmo que se presenta con mayor rapidez e intensidad. La mayor irrigación de la vagina y la vulva asegura que la congestión vascular aumente y con ello la respuesta a la estimulación sexual.
Una vez que se logra el orgasmo se produce la fase de relajación o resolutiva. En la mujer embarazada este proceso toma más tiempo.
¿Por qué es seguro tener relaciones sexuales durante el embarazo sano?
Cuando el embarazo es saludable y no hay ningún factor que lo haga considerar de alto riesgo el sexo es seguro. Las características anatómicas del cuello del útero, el tapón mucoso que preserva la entrada del cuello del útero y el líquido amniótico que rodea al bebé ofrecen una protección efectiva durante el embarazo.
Otras mujeres piensan que el orgasmo puede desencadenar el trabajo de parto, esto no es real. Lo que sucede es que el semen contiene unas hormonas llamadas prostaglandinas que pueden producir contracciones pero no asociadas al trabajo de parto. Esto se ha comprobado en diferentes trabajos.
Algunos beneficios de tener sexo durante el embarazo
El tener sexo durante el embarazo contribuye a la preparación para el parto porque los músculos vaginales se fortalecen y ejercitan. Lo anterior ayuda a que estén más fuertes para enfrentar las contracciones y dilataciones de esta zona.
Algunos estudios consideran que el sexo durante el embarazo contribuye a liberar hormonas que producen sensación de placer y bienestar tanto en el bebé como en la madre. La calidad de los orgasmos es más intensa y placentera.
También el sexo durante el embarazo puede ayudar a fortalecer la relación de la pareja y a experimentar nuevas posiciones y posturas. Se producirá mayor complicidad e intimidad cuando la pareja adiciona experiencias no vividas con anterioridad.
Desde el punto de vista psicológico el sexo contribuye a liberar las tensiones propias que un embarazo impone a los futuros padres. También eleva la autoestima porque la mujer se siente deseada con independencia de los cambios físicos que experimenta su cuerpo.
¿Cómo se comporta el apetito sexual durante el embarazo?
Cada pareja y cada embarazo son únicos al igual que lo es la vida sexual e íntima de ambos. El deseo sexual puede ser fluctuante durante el embarazo y modificarse en las diferentes etapas del embarazo.
Hay algunas mujeres que aseguran que su apetito sexual o libido aumenta durante el embarazo, otras plantean que se mantiene igual y otras que al parecer son la mayor cantidad consideran que disminuye.
Esto puede estar asociado a las molestias y cambios en los diferentes trimestres del embarazo a lo cual nos referiremos en detalla posteriormente.
¿Y qué piensan los hombres del sexo durante el embarazo?
También el hombre puede mostrar temores tener sexo durante el embarazo. Esto puede estar determinado por mitos, creencias religiosas, culturales o tradiciones. También por la falsa creencia de que pueda influir negativamente en el desarrollo de la gestación y que afecten a su bebé.
Los hombres en ocasiones sienten celos de la mayor atención que la mujer le dedica a su embarazo, sienten que podría afectarse la vida íntima de la pareja, que los cambios en el cuerpo de la mujer puedan conllevar un rechazo al contacto íntimo o en otros casos está motivado por una prohibición médica.
Según demuestran algunos estudios, para muchos hombres el embarazo es algo muy sexy y estimulante, sin embargo para otros le inhibe sus deseos. Algunos llegan a no poder acercarse a la mujer que va a convertirse en madre.
En ocasiones la actitud del hombre obedece a respeto, en otras a excesivo cuidado, o podría ser debida a mitos. Lo cierto es que la sexualidad en todas sus manifestaciones es algo que la pareja debe preservar. La intimidad, la complicidad en ese momento tan especial de la pareja debe ser cuidada.
En los diferentes trimestres del embarazo se requiere comprensión, para realizar prácticas que satisfagan a ambos miembros de la pareja, comprensión, comunicación abierta, experimentar y buscar alternativas. La sexualidad se puede expresar de numerosas maneras y la gran mayoría de los hombres tratan de acercarse más a su pareja y procuran brindarle apoyo, seguridad durante el embarazo para que se encuentre más cómoda y tranquila.
¿Hay cambios en la libido de la mujer durante el embarazo?
Aunque, como ya hemos comentado que las relaciones sexuales son seguras en una gestación normal, los cambios que la mujer experimenta durante el embarazo pueden tener consecuencias en sus relaciones sexuales. Cada trimestre lleva asociados una gran diversidad de síntomas, temores y malestares que pueden afectar el deseo sexual de la mujer. A continuación detallamos algunos de los más frecuentes en cada trimestre.
Sexo en el primer trimestre del embarazo
En la página dedicada a los cambios en las etapas del embarazo expusimos como el cuerpo de la mujer se va modificando y adaptando desde el punto de vista morfológico y fisiológico a esta nueva situación y a las demandas del desarrollo fetal.
Los malestares del embarazo, evidentes en los primeros meses del embarazo pueden determinar que en ocasiones no desees las relaciones sexuales. Se estima que el 54% de las mujeres lo manifiesten de esa manera en esa etapa del embarazo.
En contraposición hay muchas mujeres que en lugar de experimentar un bajo deseo sexual están más motivadas a tener sexo en esa etapa. Esto también se relaciona con los cambios hormonales que se producen y originan una mayor sensibilidad en los genitales y una mayor lubricación vaginal. Lo anterior puede conducir a orgasmos más intensos y rápidos.
En esta etapa del embarazo puede existe un aumento de sensibilidad en los senos que podría llegar a ser molesta. También se podría producir un sangramiento discreto tras la penetración que aunque no conlleva riesgos para el bebé puede intimidar a la pareja.
Relaciones sexuales en el segundo trimestre
El segundo trimestre del embarazo es considerado como el momento de esplendor, porque desaparecen las molestias iniciales a partir de la semana 14 y la barriga no ha crecido demasiado. El organismo está más adaptado a los cambios y se multiplica el apetito sexual de la mujer.
La mujer muestra una mayor facilidad para excitarse y la lubricación de la vagina, el aumento de volumen de los labios mayores y menores le posibilita tener un acto sexual más placentero que antes de estar embarazada. Puede llegar al orgasmo en más de una ocasión. El orgasmo puede producir algunas contracciones que se consideran como respuestas fisiológicas y no como trabajo de parto.
Lo más conveniente para el sexo en el tercer trimestre…
El sexo a partir de la semana 24 puede ser un poco más incómodo y la pareja preocuparse más por el posible daño a su bebé. Pero lo anterior no impide seguir teniendo relaciones sexuales satisfactorias. Será necesario modificar las posiciones o inclusive llegar a eliminar la penetración si así lo indicara el médico, pero existen numerosas formas para lograr el placer sexual.
Muchas parejas tienen temores infundados, mientras que no existan complicaciones del embarazo, el sexo es seguro aun en el tercer trimestre. Lo que se requiere es adecuar las posiciones y que ambos miembros de la pareja experimenten el deseo de la intimidad.
Es normal que el bebé se mueva y que después del coito se produzcan contracciones porque el semen del hombre contiene una sustancia denominada prostaglandinas que pueden producir ligeras contracciones.
¿Cuáles son las posiciones para el contacto sexual con penetración para el sexo durante el embarazo?
Para practicar el sexo durante el embarazo es muy importante que la mujer se sienta cómoda y que su abdomen no se presione. De ahí que es conveniente en la misma medida que la barriga va creciendo emplear posiciones que faciliten este propósito.
Cada pareja debe explorar lo que le resulte más placentero y le provoque menos malestares a la mujer. Lo principal a tener en cuenta es la comunicación que en esta etapa es trascendente y que contribuye a la profundización de la relación en la vida de una pareja.
El segundo trimestre es momento de adaptarse a nuevas posturas, pues a medida que va aumentando el tamaño del útero ciertas posiciones pueden resultar incómodas, algo aún más relevante en el último trimestre del embarazo.
Los expertos en el tema consideran que hay posiciones que aportan esos beneficios, entre ellas se recomiendan:
Hay algunas posturas recomendadas durante el embarazo para no oprimir el abdomen, especialmente para el segundo y tercer trimestre donde ya es mayor el volumen de la tripa.
Hombre acostado y mujer encima
El hombre acostado boca arriba en la cama y la mujer sentada a horcajadas sobre la pelvis de él. Es preferida por muchas parejas durante el segundo trimestre del embarazo porque es estimulante tanto para el hombre como para la mujer.
Otra variante es que en lugar de la mujer colocarse de frente se sitúe de espaldas. Ella es la que controla los movimientos y su intensidad. Cuando la barriga es muy grande se puede cansar.
El arrodillado en el suelo y ella boca arriba en el borde la cama
No importa el tamaño que tenga tu barriga, si te colocas en el borde de la cama boca arriba y él está arrodillado en el suelo podrás tener una penetración muy placentera. No sentirás compresión de tu abdomen y esta posición estimula la pared vaginal y te hará disfrutar del sexo.
Acostados en posición perpendicular
En este caso los dos están acostados, el hombre de lado y la mujer perpendicular a su zona genital. Estarás muy cómoda porque podrás apoyar la espalda y la cabeza. Por su parte tu pareja tendrá la posibilidad de acariciar tu clítoris y tus mamas.
De lado o postura de las cucharas
El hombre y la mujer acostados de lado en la misma dirección. Ella pegada al pecho de él y con las piernas extendidas o ligeramente flexionadas.
Es una postura cómoda y relajante para la mujer y al mismo tiempo favorece las caricias de él sobre el cuello, las orejas y la barriga. Tiene el inconveniente de que el pene puede salir fácilmente.
La postura del misionero
Esta postura aunque clásica y popular puede funcionar hasta que el abdomen no ha crecido mucho. La mujer permanece boca arriba con las piernas separadas y el hombre se coloca encima de ella.
La postura esta puede resultar placentera porque se puede acompañar de besos, miradas y caricias. En la medida que la barriga va creciendo, el hombre debe ser más cuidadoso en no dejar caer su peso sobre la misma para que la mujer no experimente la sensación de aplastamiento.
La postura del perrito o desde atrás
Esta posición donde la mujer apoya el peso de su cuerpo en manos y rodillas es muy funcional porque la barriga no hace contacto con ninguna superficie. Ella con las piernas separadas y el hombre por detrás de ella de rodillas introduce su pene.
Cuando a la mujer le comienza a molestar el peso de su pareja es muy conveniente y como elemento negativo es que la mayor parte del peso del cuerpo de ella descansa en sus brazos. Se aconseja descansar las rodillas en un cojín.
Otra variante es aprovechar las escaleras y de esta manera se puede lograr mayor comodidad.
Sentados los dos
El hombre se sienta en una silla o sillón y la mujer lo hace sobre él a horcajadas. De acuerdo al tamaño del abdomen de la mujer puede hacerlo de frente a él o de espaldas.
Puedes ensayar decenas de posiciones para satisfacer el sexo durante el embarazo. Es muy importante que no dejes de dedicarle un tiempo diariamente a la relación de pareja.
Si hay etapas o momentos en los cuales el coito no te resulta placentero aborda el tema de forma franca y abierta con él. Recuerda que las miradas, los mimos, las caricias y otros placeres sexuales pueden ser muy beneficiosos. Un simple texto con un mensaje expresándole tu amor y tu cariño pueden contribuir a afianzar y consolidar una relación de pareja.
Sobre el sexo oral y anal, durante el embarazo…
El sexo oral, no tiene contraindicaciones durante el embarazo siempre y cuando tu pareja no tenga ninguna enfermedad de transmisión sexual. La ingestión de semen no afectará tu embarazo ni al feto. En ocasiones excepcionales y muy raras si se expele aire dentro de la vagina se podría producir un embolismo aéreo que pudiera ser mortal para el bebé y la madre.
Con relación al sexo anal puede ser molesto porque durante el embarazo se desarrollan hemorroides en las mujeres. Siempre tener presente que después del sexo anal no debes de practicar el sexo vaginal porque las bacterias que normalmente viven en el recto pudieran causar infecciones en la vagina.
¿Cuándo no es conveniente tener sexo durante el embarazo?
Cuando un embarazo está considerado de alto riesgo o se presentan complicaciones que hacen temer por el bienestar de madre y el feto no son convenientes las relaciones sexuales con penetración. Siempre recuerda que hay otras múltiples formas de manifestar el amor y la atracción hacia tu pareja aunque no se produzca la penetración.
No es conveniente el sexo durante el embarazo con penetración, cuando se presenta:
- Dolor durante las relaciones sexuales.
- Si tienes menos de 36 semanas de embarazo y existe amenaza de parto prematuro.
- Rotura prematura de la bolsa amniótica.
- Placenta previa o inserción baja de la placenta.
- Cuello uterino corto o incompetencia cervical.
- Sangrado vaginal.
- Pérdida de líquido amniótico.
- Abertura temprana del cuello del útero.
- En los embarazos múltiples y básicamente en el último trimestre.
- Antecedentes de aborto espontáneo.
- Cuando se producen fuertes y dolorosas contracciones uterinas después de la penetración.
- No se debe tener sexo durante el embarazo si la mujer ha sido sometida a pruebas especiales como amniocentesis.
- Cuando la mujer sufre de hipertensión arterial no controlada.
- Si tu pareja tiene una infección de transmisión sexual activa o si le han diagnosticado una recientemente, evita todas las formas de relaciones sexuales.
- Durante los tratamientos contra herpes vaginal u otras infecciones genitales.
Siempre que tengas una duda no tengas temor a consultar a los especialistas en las consultas de seguimiento de tu embarazo.
¿En cuánto tiempo después del parto podré tener relaciones sexuales?
Normalmente el organismo requiere entre cuatro y seis semanas después del parto para recuperarse. En la mujeres que han tenido partos naturales en ese periodo de tiempo se cerrará el cuello del útero, cesará el sangramiento y se reparará cualquier desgarro o rotura que se haya producido durante el trabajo de parto.
Siempre es conveniente que tu médico te revise antes de tener relaciones sexuales con penetración después del parto o la cesárea. Si no deseas tener un nuevo embarazo debes de seleccionar el método anticonceptivo que vas a emplear.
Y una recomendación final…
En una gestación sana y sin factores de riesgo, es completamente normal tener sexo durante el embarazo y la frecuencia y posturas la deciden tú y tu pareja.
Si hay algunos momentos en que no las deseas o no te resultan placenteras las relaciones sexuales con penetración, recuerda que la intimidad la puedes mantener de maneras muy diversas.
No por estar embarazada tienes que privarte de los placeres del sexo y de sus beneficios. Puedes ser una excelente mujer, amante y futura mamá.