¿Cuándo debes preocuparte porque todavía tu hijo no habla?

Cuando una madre escucha las primeras palabras de su hijo la emoción es manifiesta y ese primer mamá, papá o tata permanecerá por siempre en su memoria. Pero si al cumplir los dos primeros años todavía tu hijo no habla la mayoría de las madres experimentan ansiedad y alarma. En numerosas ocasiones esto es completamente normal y no tienes nada de que preocuparte, pero en otras si requiere de intervenciones médicas y psicológicas, desde Canal Chupete te comentamos.

Para conocer más sobre otros aspectos del desarrollo normal lee: Niños de 3-6 años: desarrollo físico y psicológico

Todavía tu hijo no habla ¿Es normal?

Hay hitos en el desarrollo del lenguaje y la comunicación que marcan avances en el desarrollo de las capacidades y evolución de nuestros pequeñines. Si todavía tu hijo no habla lo primero que debes hacer es conocer el comportamiento promedio de los niños de su misma edad, pero nunca estableciendo comparaciones con familiares o amigos.

Las lecturas de cuentos o historias y estar en constante conversación durante el día para fortalecer la comunicación desde muy pequeños contribuye a la mejora del habla

Cada niño es único y marcha a su propio ritmo puede hacerlo más lento o por el contrario estar muy adelantado y sin embargo los dos son completamente normales pero cada uno tiene su propio ritmo evolutivo.

En los primeros meses

Desde que el niño nace se comunica mediante al llanto, posteriormente sigue con la vista las voces, comienza a reconocer rostros y se ríe ante los mismos, posteriormente incorpora las carcajadas, balbucea sus primeras palabras. Evidencia así que no tiene problemas de audición y comienza su preparación para el desarrollo del lenguaje.

A los 12 meses

Al arribar a su primer año ya el pequeño es capaz de decir palabras sueltas. Al mismo tiempo son capaces de entender ordenes simples y reaccionar ante las mismas.

Si todavía tu hijo no habla vale la pena destacar que, para una positiva estimulación del lenguaje en los niños, los padres deben acompañarlo en todo momento

Entre los 2 y los 3 años 

Entre los 18 y 20 meses, los pequeños por lo general son capaces de hablar más de 10 palabras y ya entre los 21 y 30 meses es capaz de tener 50 palabras. A los dos años el niño es capaz de formar frases cortas de dos o tres palabras como “agua mamá”. Entiende bastante lo que se le dice y hace muchas preguntas.

Al final del tercer año ya tu hijo debe ser capaz de seguir instrucciones más complejas, reconocer los objetos y comprender la mayor parte de lo que se le dice.

A los 4 años 

Al arribar a los 4 años tu hijo debe ser capaz de hablar claramente y ser entendido por personas fuer de su entorno. Es capaz de hacer preguntas, y domina las reglas básicas de la gramática. Es normal que no pronuncie bien.

Entre los 5 y los 6 años 

A los 5 años el niño es capaz de identificar las letras y conoce el significado de palabras sencillas. Puede relatar cuentos cortos con sus propias palabras y construir oraciones de 5 palabras o más.

Señales de alarma porque todavía tu hijo no habla

Si todavía tu hijo no habla podría ser que sea un poco perezoso para hablar o hablante tardío, pero pudiera ser que se debiera a retrasos en su desarrollo, aquí algunas claves para diferenciar estas señales de alarma.

Si todavía tu hijo no habla debes conocer lo que para su edad es más común y si notas signos de alarma debes acudir al pediatra
  • Uno de los elementos claves para diferenciar una situación de la otra es la capacidad que tiene el pequeño de comprender lo que se le dice lo que es llamado lenguaje receptivo. El entiende lo que se le dice pero no es capaza de expresarlo o no ha desarrollado su capacidad de expresarlo, también llamado lenguaje expresivo.
  • Cuando la afectación se relaciona con su capacidad de expresión generalmente son hablantes tardíos, cuando está afectado el lenguaje receptivo y el expresivo pudiera estar relacionado con un retraso en el desarrollo.
  • Se debe sospechar que hay alteraciones en el desarrollo del lenguaje cuando a los 12 meses no utiliza gestos que manifiesten su comunicación como por ejemplo saludar con las manos.
  • Si a los 18 meses no imita sonidos o no comprende bien las palabras es una señal de alarma.
  • Cuando al cumplir los dos años el niño no es capaz de construir frases completas con dos o tres palabras y solo se limita a imitar sonidos puede considerarse un signo que requiere atención.

¿Cuáles pueden ser las causas de que todavía tu hijo no habla?

Si todavía tu hijo no habla puede ser debido a numerosas causas, pero la mayoría de las veces es debido a hablantes tardíos y no propiamente a retrasos en el desarrollo. Existe una amplia gama dentro de la normalidad, pero cuando el patrón de comportamiento en el lenguaje difiere grandemente, debe ser atendido para evaluar el lenguaje y el habla.

En ocasiones las causas que determinan los retrasos en el habla, son determinadas por la falta de estimulación  y de la adecuada atención de padres y cuidadores.

Las limitaciones en el desarrollo de la comunicación y el lenguaje pueden llevar al pequeño a discapacidades de aprendizaje en la escuela

En otras se asocia a problemas en de la cavidad oral, la lengua, o a afecciones de causa infeccioso del tracto respiratorio superior como otitis, disfunción tubaria o respiración bucal. También pueden estar asociados a problemas auditivos de diferente índole.

En otras ocasiones puede existir incoordinación entre las áreas del cerebro que contralan la articulación del habla y su coordinación entre lengua, labios y mandíbula.

Si todavía tu hijo no habla también podría ser debido a que existen antecedente familiares de personas que hablaron tarde o tuvieron problemas en el lenguaje.

¿Que puedes hacer para estimular el desarrollo del lenguaje?

Si todavía tu hijo no habla… a los padres les corresponde el papel protagónico, en la detección, diagnóstico y atención temprana. No debes observarlo pasivamente, tienes que ser el que juegue el principal papel.

Si todavía tu hijo no habla y estas preocupada lo más probable es que sea debido a que es un hablante tardío, pero debes atenderlo lo antes posible
  • Lo primero es poder detectar los primeros indicios o signos de alarma que previamente describimos.
  • Desde las primeras etapas de la vida debes de hablarle y asociar los rostros, con los nombres, contarle cuentos, imitar sonidos, cantarle, contarle cuentos y ayudarlo a conocer el mundo que lo rodea.
  • Siempre los padres y cuidadores deben de hablarle a los pequeños de forma clara y precisa, porque ellos adquieren el lenguaje por imitación.
  • Habla con tu niño durante todo el día, incluso cuando le cambias sus pañales o durante las comidas. Llama su atención y habla sobre lo que estás haciendo.
  • Cuando hables con tu hijo, hazlo a un nivel superior al suyo. Por ejemplo, si usa dos palabras, tú usa tres, pero no le confundas con frases demasiado complejas.
  • Cuando pronuncie mal alguna palabra no abochornarlo, solo que usted la pronuncie correctamente para que el la aprenda.
  • Prestarles especial atención a las normas elementales como saludar, despedirse y otras muestras de afecto.
  • Mediante los juegos puedes estimular el desarrollo del lenguaje y sus habilidades de comunicación.
  • Acorde con los signos y la edad del pequeño debes de acudir a un especialista. Podría ser necesario que además del pediatra lo revisara un audiólogo o un especialista en vías respiratorias superiores.

Si todavía tu hijo no habla una intervención temprana es fundamental

Cuando tu hijo tiene síntomas que hagan sospechar que es un hablante tardío, retraso en el desarrollo del lenguaje podría estar asociado a un trastorno mayor. Sea de una manera u otra lo que si no admite dudas que cuanto más temprano se diagnostique y se atienda más rápido serán sus avances. Las limitaciones en el desarrollo de la comunicación y el lenguaje pueden llevar al pequeño a discapacidades de aprendizaje en la escuela.

La base para la asimilación de todas las áreas del desarrollo académico está relacionada con el lenguaje oral, así que no escatimes ni tiempo, dedicación y atención al desarrollo del lenguaje de tu hijo.

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