Si hablamos de juegos de mesa para niños, tal vez suene un poco anticuado en esta era de pantallas y juegos electrónicos. Sin embargo, jugar juegos de mesa es un placer incomparable y provee diversión garantizada. Precisamente la gran virtud de los juegos de mesa para niños es que están al alcance de jugadores de todas las edades ya que sus reglas suelen ser bastante simples, y permiten compartir inolvidables momentos en familia.
Aprende cómo hacer: Juegos con letras para niños
Juegos de mesa para niños de tres a cinco años
Los juegos de mesa para niños de tres a cinco años deben ser coloridos, divertidos y con reglas sencillas y se basan principalmente en ejercitar la memoria y la observación. Se juegan con cartas, dados o fichas.
Hay varios juegos que son versiones simplificadas del tradicional juego de la oca, cuyos dados tienen caras de colores en vez de números y se deben adelantar las casillas del mismo color. También hay dominós temáticos, ruletas que indican distintas acciones a realizar, “memotest”, juegos de rol y juegos de destreza donde hay que ir apilando elementos.
Juegos de mesa para niños que ya saben leer y escribir
Compartir momentos con los niños que ya saben leer y escribir puede ser ¡muy divertido! Aquí te presentamos una colección de juegos ideal para pasar una tarde divertida o reunirse para jugar después de la cena, en vez de ver televisión o jugar con los juegos electrónicos.
Ten presentes los tiempos frente a la pantalla permitidos de acuerdo a las edades, como bien lo recomienda la Asociación Americana de Pediatría: se trata de la regla 3 – 6 – 9 – 12, es decir, nada de pantallas de 3 a 6 años; pantallas sin acceso a Internet de seis a nueve años; pantallas con acceso a Internet y control parental de 9 a 12 años y libertad responsable a partir de los 12 años.
Dominó: un juego tradicional y divertido. Son 28 fichas con combinaciones de dos números del 0 al 6 representados con puntos. Cada jugador se hace de siete o cinco fichas según la cantidad de jugadores. Comienza el jugador que tiene la ficha doble más alta, la cual colocará en el centro de la mesa. A su turno, cada jugador debe colocar una ficha uno de cuyos números coincida con alguno de los que están en los extremos del dominó. El juego termina cuando no hay más fichas para colocar o un jugador colocó todas sus fichas. Actualmente hay versiones como el dominó curvo, con piezas curvadas que hacen más difíciles las partidas ya que no todas las piezas encajan con el número coincidente.
Generala: juego de dados tradicional. Se juega con cinco dados que tienen las caras numeradas del 1 al 6 (los números están representados con puntos). Cada jugador tiene derecho a tres tiradas de dados. En cada tirada se van separando los dados con los que arma su juego. Al finalizar el turno, se anota el puntaje obtenido en las tres tiradas. Por ejemplo, si consiguió tres dados con el as o número 1, se anota tres puntos al uno. Otras combinaciones pueden ser: escalera (los números del 1 al 5 ó 2 al 6, vale 20 puntos); full (tres dados iguales y dos dados iguales entre sí, vale 30 puntos); póker (cuatro dados iguales y uno desigual, vale 40 puntos), generala (todos los dados iguales, vale 50 puntos) y generala doble (es una segunda generala, vale 100 puntos). Si estas figuras salen “servidas”, es decir, en la primera tirada de dados, tienen un adicional de 5 puntos. Los jugadores pueden renunciar a completar alguna categoría a fin de continuar en el juego. Por supuesto gana el jugador que haya obtenido mayor puntaje.
Perinola: otro juego tradicional. Para jugar se necesita una perinola, que es una suerte de trompo de seis caras con las siguientes inscripciones: “Todos ponen”, “Toma todo”, “Toma 1”. “Toma 2”, “Pon 1” y “Pon 2”. También se necesitan frijoles, porotos o garbanzos para representar el capital de los jugadores. Se reparten diez frijoles a cada jugador y se reservan otros 10 frijoles para el pozo. Para comenzar, todos los jugadores aportan un frijol al centro de la mesa. Luego cada uno a su turno hace girar la perinola y cuando ésta se detiene, la cara superior indica qué es lo que debe hacer. Cuando sale la cara “Toma todo”, los jugadores deben aportar nuevamente un frijol al centro de la mesa. Si algún jugador pierde todo su capital puede pedir un frijol al pozo. El juego termina cuando los jugadores quieran o estén demasiado cansados como para seguir jugando.
“Tutti Frutti”: es un juego de palabras. Cada jugador debe contar con una hoja de papel y un bolígrafo. Se dibujan columnas encabezadas por distintas categorías de elementos como “Animales”, “Lugares”, “Nombres”, “Comidas” o lo que la imaginación les dicte. El juego comienza con un jugador que empieza a recitar el abecedario mentalmente hasta que otro jugador le ordena que se detenga; entonces debe decir la letra en la que se detuvo. Todos los jugadores deben rellenar las categorías con las palabras correspondientes que comiencen con esa letra. La ronda termina cuando un jugador completa todas las categorías. Todos los jugadores deben leer las palabras que escribieron. Se asignan 5 puntos por cada categoría completada. Para la siguiente ronda, se encarga a otros jugadores decir el abecedario y dar la orden de detenerse. El juego termina cuando los jugadores se cansan de jugar.
Juego de la Oca: el más tradicional de los tradicionales juegos de mesa para niños. El objetivo del juego consiste en llegar a la casilla central de la Gran Oca avanzando posiciones en el tablero mediante tiradas de dados. Se necesita un tablero, fichas y uno o dos dados según la versión del juego. El tablero va indicando qué se debe hacer en cada casilla, como avanzar más casillas, tirar nuevamente, retroceder, perder el turno o lo que corresponda.
Ludo o Parchís: Es definido como un juego de estrategia. Se necesita el tablero específico, dos dados y 16 fichas (cuatro por cada color). Se cree que es un juego muy antiguo, originario de la India. El objetivo es mover todas las fichas alrededor del tablero y volver al punto de partida. Para decidir quién comienza, todos los jugadores tiran un dado y comienza el que sacó la puntuación más baja. Para los turnos se sigue el sentido de giro de las agujas del reloj. Para poder sacar una ficha de las casillas de partida, el jugador debe obtener la puntuación 5. Si no la obtiene, deja pasar el turno. Hasta que no se obtiene un cinco no se puede salir de la casilla. Luego cada ficha avanza tantas casillas como puntos obtuvo en la tirada de dados. Los jugadores pueden distribuir los puntos entre las fichas que tienen en juego, por ejemplo si sacó un 6 en un dado y un 2 en el otro, puede avanzar ocho lugares con una ficha o dos con una y seis con otra. Los jugadores pueden capturar fichas de sus contrarios.
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