12 secretos de la leche materna sorprendentes y maravillosos

Los secretos de la vida y la naturaleza no dejan de sorprendernos. Entre ellos uno de esos increíbles y maravillosos es la capacidad de la leche materna para responder a las necesidades de tu hijo acorde con su etapa de desarrollo.

Anteriormente en Canal Chupete nos referimos a los beneficios de la lactancia materna durante los 6 primeros meses de vida y aún más allá acorde con las posibilidades de cada mujer. A los 6 meses comienza la incorporación de otros alimentos. Pero hoy vamos a comentar sobre algunas particularidades de la leche materna y como va modificando su composición para satisfacer la demanda de nutrientes de cada etapa del desarrollo del pequeño, lo que ha llevado a considerarla mucho más que un alimento. Para algunos es casi una medicina.

La composición de la leche materna se adapta a las necesidades que demanda el bebé en cada etapa de su desarrollo, pasa por calostro, leche de transición y leche madura

Para conocer más sobre el tema te recomiendo la lectura de: Lactancia materna cuanto mayor tiempo mejor futuro para tu hijo

1.- La leche materna es mucho más que un alimento

Algunos califican a la leche materna como un líquido inteligente, porque tiene la capacidad de adaptarse a las necesidades nutricionales de tu bebé en cada una de sus etapas de desarrollo y más aún también lo hace durante en el transcurso de una toma, dependiendo de la hora del día y hasta acorde con los cambios climáticos.

Las mamas y la leche materna se comportan como una fábrica inteligente que tienen la capacidad de adaptarse por sí sola a las demandas del pequeño

2.- El calostro, la primera leche

En los primeros días después del parto se produce el calostro, tiene un color amarillo o anaranjado, es más denso y viscoso. El mismo contiene más de 1 000 proteínas y aminoácidos, anticuerpos, glóbulos blancos lo que contribuye de forma significativa al desarrollo de los órganos y a la protección contra infecciones. Otros componentes del calostro son más de 200 oligosacáridos que ayudan a la función intestinal. Esta primera leche es muy rica en vitaminas A, E y K y minerales, lo que ayudará a la formación de huesos y dientes.

3.- Leche materna de transición

El recién nacido entre dos y cuatro días después del parto aumenta su consumo de leche y en correspondencia con eso así mismo aumenta la producción de leche materna. Tu bebecito al tercer día ya estará consumiendo entre 300 a 400 mililitros (mL) en 24 horas y cuando llega al 5to día ya consumirá entre 500 y 800 mL.

La leche de transición es más cremosa que el calostro, pero mantiene niveles elevados de grasa azúcares como la lactosa, su aporte en calorías es alto y se considera que es un magnífico alimento para contribuir al desarrollo del sistema nervioso, el cerebro y los ojos.

Entre los 5 y 14 días después del parto es que se produce la leche de transición y es previa a la estabilización de la composición de la leche o sea a leche madura.

4.- La leche madura

Cuando el bebé llega a las cuatro semanas de edad ya la leche ha madurado. Las concentraciones de proteínas, vitaminas, y minerales son inferiores a las del calostro.

En contraste contiene una gran cantidad de componentes bioactivos como hormonas, enzimas e inmunoglobulinas que ejercen importantes acciones fisiológicas en el establecimiento de los patrones de sueño, del apetito y refuerzan el vínculo materno. También favorece la absorción del hierro, y refuerzan el sistema de defensa del organismo.

A todo lo anterior se adiciona que ayuda a la expresión genética del pequeño y ayudan a remodelar el pecho de la madre.

5.- Leche materna para prematuros 

Cuando el parto se produce antes de las 36 semanas de gestación, los bebés nacen fisiológicamente inmaduros, también su nivel nutricional también está comprometido. En estos casos la leche materna para prematuros es diferente a la que se produce cuando el bebé nace a término. Tiene niveles más altos de proteínas y aminoácidos libres, así como calcio, sodio, grasa, energía y algunas otros minerales y vitaminas. Esta leche prematura le confiere al recién nacido mayor protección inmunológico y favorece su desarrollo gastrointestinal y neurológico. No obstante si el bebé pesa menor de 1500 gramos será necesario complementar esas altas demandas de nutrientes.

La leche prematura tiene también niveles más altos de factores inmunológicos y antiinflamatorios, entre ellos destacan los elevados niveles de lactoferrina una proteína asociada a la respuesta contra las infecciones.

Durante los primeros 6 meses de vida la leche es el único alimento que recibe el niño, pero después de los 6 meses la leche sigue aportando el 93% de las calorías

6.- Aporte de la leche materna después de los 6 meses

Después de que el bebé arriba a los 6 meses de vida comienza la alimentación complementaria, comenzando la introducción de nuevos alimentos. Pero aun en esa nueva etapa de la vida de tu pequeño la leche materna aporta el 93% de las calorías diarias acumuladas y entre los 11 y 15 meses de vida representará el 50% de las necesidades recomendadas.

7.- Leche materna y sus modificaciones en cada toma 

Otro de los misterios de la leche materna es que su cremosidad y densidad varía durante cada toma, siendo al inicio mucho menos grasa que al final debido al desplazamiento de la leche y al vaciado del pecho.

También se ha comprobado que la leche materna se adapta al momento del día o la noche.

8.- Tu bebé es capaz de reconocer el olor de la leche materna

Los recién nacidos tiene un sentido del olfato muy bien desarrollado, por eso son capaces de identificar desde los primeros momentos el olor de la leche materna. Por eso se recomienda que la madre no emplee lociones o perfumes fuertes que impidan la localización del pezón por parte de sus pequeños.

El recién nacido tiene un sentido del olfato muy desarrollado y puede identificar el olor de la leche materna y buscar el pezón desde los primeros momentos

9.- La cantidad de leche materna es suficiente

Se estima que los pequeños consumen alrededor del 67% de la leche materna producida en cada toma, por eso es por lo que la madre es capaz de satisfacer la demanda del pequeño. Cuando esto no se comporta de esta manera generalmente está asociado a malas prácticas en la forma de dar el pecho o podría estar asociado a infecciones o daños en el pezón que le impidan al pequeño la adecuada succión.

10.- La leche y los pechos modifican su temperatura

Los pechos pueden calentarse o enfriarse acorde con las necesidades del pequeño. También la leche modifica su composición acorde con las necesidades del pequeño, así cuando hay mucho calor la leche tiene un mayor contenido de agua para evitar la deshidratación.

11.- Un pecho produce más que el otro

Con independencia de que la madre sea derecha o izquierda por lo general el pecho de la derecha produce más leche que el izquierdo.

El pecho de la derecha produce más leche que el izquierdo, pero se estima que en cada toma el bebé solo consume el 67% de la leche producida

12.- La leche materna tiene un efecto relajante

Se ha demostrado que la leche materna contiene una hormona llamada relaxina que ejerce una influencia marcada en producir la relajación tanto de la madre como del feto.

Las mamas y la leche materna una fábrica ideal

Numerosos trabajos demuestran las innumerables ventajas y beneficios que tiene la lactancia materna, tanto para la madre como para su hijo. No es un capricho, es un reclamo de todas las organizaciones especializadas. Se recomienda mantener la lactancia materna por el mayor tiempo que sea posible. No hay alternativa mejor para tu hijo que la leche materna.

Las mamas y la leche materna se comportan como una fábrica inteligente que tienen la capacidad de adaptarse por si solas a las demandas del pequeño. Funcionan de una forma muy eficiente y económica. Son un laboratorio maravilloso y sorprenderte para proporcionarle a los pequeños lo mejor para su crecimiento y desarrollo. No impidas que tu hijo disfrute de este gran regalo de la naturaleza.