Primera menstruación o menarquia, un reto para las chicas

La primera menstruación o menarquia no es más que el primer sangrado vaginal que presenta la adolescente. Es la culminación de una serie de cambios fisiológicos y morfológicos que se producen y marcan la pubertad.

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Socialmente, este hecho fue considerado en la antigüedad como el momento de paso de niña a mujer, debido a que es el inicio de la fertilidad, y significaba un cambio de vida para la muchacha. Hoy en día es considerado de forma más natural y no un rompimiento total con la niñez.

Adolescencia y menarquia

El tránsito hacia la vida adulta de un niño es denominado  adolescencia. Esta etapa del desarrollo implica profundas transformaciones tanto morfológicas, sociales como psicológicas.

Es una de los periodos de mayor complejidad y dinamismo en el comportamiento integral del joven. La Organización Mundial de la Salud estima que este proceso transcurre entre los 10 y 19 años.

Uno de los cambios asociados a la pubertad es el desarrollo de la capacidad reproductiva que se expresa tanto en los hombres como en las mujeres. En los primeros es el desarrollo de la posibilidad de producir espermatozoides y en las mujeres liberar óvulos y la aparición de la primera menstruación o menarquia.

Los cambios que anticipan a la primera menstruación

Debido a que la menarquia es posterior a una serie de cambios fisiológicos notables es posible saber más o menos cuándo ocurrirá y, por tanto, preparar a la pequeña para el momento.

Durante aproximadamente dos a 3 años la producción de estrógenos causa el crecimiento del útero y, con esto, viene el crecimiento de las mamas, el tamaño corporal, el aumento del tejido adiposo en la zona pélvica, el crecimiento de vello púbico, así como un cambio en el olor corporal y la piel.

Un proceso natural del cuerpo: la primera menstruación

Con el paso de los siglos, el momento de la menarquia ha variado. Mientras que en el siglo XX ocurría aproximadamente a los 14 años, en la actualidad, la edad promedio ahora es 12 años. En Europa Occidental el 95% de las niñas presentan la menarquia entre los 11 y 13 años. Los datos de España muestran valores medios de 12,7 años en Galicia. En el medio urbano de 12,4 y en el rural de 13 años.

A pesar de los estudios realizados, no se sabe con exactitud a qué se debe este cambio aunque sí se conoce que la primera menstruación depende de la grasa corporal de la niña y de la secreción de estrógenos por los ovarios.

Factores que influyen en la aparición de la menarquia

Los factores que afectan la aparición de la menarquia, están íntimamente relacionados con la información genética. Diversas fuentes reflejan que entre un 50 y un 75 % de la edad de presentación de la menarquia está determinada por la edad en que las madres presentaron la misma. También factores raciales y étnicos ejercen su influencia.

La alimentación, lo psicológico, el estado de salud en general, bajo peso al nacer, e influencia estacional y climática, así como las rutinas de ejercicios que mantengan las jóvenes pueden influir en la edad de presentación de su primer sangramiento.

Hablar con tu hija sobre la menarquia: más que necesario, imprescindible

A pesar de que la menarquia es un proceso natural resulta un momento desconcertante para la niña, por lo que es muy importante hablar con ella sobre el tema antes de que llegue.

Es imprescindible que tu niña sepa acerca de los procesos naturales por los que atravesará su cuerpo a medida que crece. Para que estas charlas sean lo menos incómodas para todos, lo ideal es mantener un ambiente de sinceridad y lo más casual posible. Si les das un tono de seriedad excesivo las chicas tienden a asustarse, una respuesta totalmente natural ante la postura de los mayores.

Intenta mantener un tono natural y hablar desde tu propia experiencia. Que tu pequeña sepa que lo que le ocurre es algo natural por lo que su mamá también pasó, que todo estará bien.

Reacciones ante la primera menstruación

No todas las niñas reciben su primera menstruación de la misma manera. Mientras algunas sienten alegría al entrar en un nuevo periodo de su vida que las acerca a la adultez con la que sueñan todos los niños, otras lo ven como algo extraño y molesto que no desean.s posible, esta reacción es necesario crear un ambiente en el que la niña pueda hablar sobre sus preocupaciones y hacer peguntas sin sentirse avergonzada.

El mejor momento para tener estas conversaciones es cuando notamos que su cuerpo está cambiando. Se sugiere a partir de los 8 años, de acuerdo al desarrollo de cada una.

Debes tener en cuenta que, si bien antes la pequeña era abierta respecto a su desnudez, al ocurrir estos cambios es posible que se muestre tímida y temerosa ante el cambio. Respeta su decisión de privacidad, pero hazle saber que estás ahí.

Algunos elementos que no debes dejar de mencionarle a tu pequeña

Al hablar de los cambios fisiológicos que experimenta el cuerpo antes, durante y después de la menarquia existen determinados elementos que no deben dejar de mencionarse.

Explicar estos cambios puede ser engorroso para los padres que también se encuentran en una posición vulnerable, por lo que lo más importante es mantener la conversación sencilla, en términos que la pequeña pueda entender. Auxiliarse de un dibujo del cuerpo humano sirve de excelente guía en estos casos.

Tener la menarquia significa no solo cambios corporales, sino variaciones en la conducta social de la pequeña.

Es importante, primero, aclarar que en estos primeros años la menstruación no será regular, sino que puede venir a intervalos muy variados por lo que es importante comenzar a conocer su cuerpo y los síntomas que alertan acerca del momento del periodo menstrual.

Hablando de sexo

Resulta imprescindible hablar acerca del proceso similar por el que pasan los varones, la espermaquia. No solo para que sepa que los cambios son parejos en ambos sexos, sino para que conozca acerca de las posibilidades de embarazo luego de estos cambios y también de los métodos de protección anticonceptivos si decide tener relaciones sexuales.

Hablar de sexo siempre resulta un momento tenso para los padres y los hijos, sin embargo, es una conversación que debe tenerse para preparar a los hijos para su futuro y evitarles cualquier trauma debido al desconocimiento. Recuerda que su primera vez influirá en su vida sexual posterior.

La menarquia: ¿cómo reaccionará mi cuerpo cada mes?

Uno de los aspectos que resultan más problemáticos para las niñas son los típicos síntomas menstruales que experimentan desde su menarquia cada mes.

El vientre un poco inflamado, los dolores de ovarios, los espasmos menstruales e, incluso, las fatigas que pueden sufrir algunas niñas son elementos que hacen de estas primeras menstruaciones un momento en el que la niña se sentirá débil, desprotegida y necesitará de todo el apoyo de sus padres.

Además de los malestares normales de la menstruación, la niña deberá aprender a usar las compresas y a mantener una higiene adecuada durante este periodo. El papel de la mamá en estos casos es muy importante pues es la persona con la que la niña se sentirá cómoda y a la que acudirá mayormente, debido a que es la que pasa por lo mismo que ella.

El uso de compresas o tampones depende de la elección personal, aunque lo recomendado es que en los primeros años se utilicen compresas, que resultan menos invasivas. Con el tiempo tu hija decidirá cuál prefiere debido a factores como la comodidad y practicidad. Las instrucciones de uso de los tampones deben ser leídas con claridad para conocer acerca del tiempo idóneo en el que deben ser cambiados.

Estate atenta a las primeras menstruaciones

Se debe tener un control de las primeras menstruaciones de tu hija para poder identificar si existe algún problema que amerite una consulta con un especialista. Una perdida excesiva de sangre, sangrado entre cada periodo, dolores muy fuertes antes y durante la menstruación, así como la aparición de irregularidades luego de un tiempo presentado un ciclo normal, son algunos de los signos que indican que se debe ver a un médico que analice correctamente el caso.

La menarquia ya llegó

La menarquia no es un castigo o un impedimento para tener una vida normal, sino un proceso biológico natural por el que pasan todas las mujeres y que permite que, más adelante, pueda quedar embarazada y convertirse en mamá.

Todo cambio que experimentan nuestros hijos nos resulta difícil a los padres, que a veces no sabemos lidiar con ellos en la forma correcta. La menarquia es el momento más importante del inicio de la pubertad de una niña y debe llevarse con tacto y siempre estar dispuesto a responder sus dudas y apoyarla.

La menarquia es natural y como tal debe ser tratada. Asegúrate de que este sea un momento en el que tu hija se sienta cómoda y segura. ¡Bríndale todo tu apoyo, te necesita a su lado!

Sabías que… La primera vez, influirá en tu vida sexual posterior