Caries de biberón: ¿debería preocuparme o es normal?

Las llamadas caries de biberón, y las caries en general en la primera dentición, se deben a la combinación de hábitos incorrectos y una mala higiene bucal del niño. Hay quien piensa que cuidar esos dientes que apenas han brotado, no vale la pena y como se van a caer es una tarea banal.

Pero si los dientes de leche se afectan por una carie alteran no solo la estética, sino la forma de alimentarse del niño. Además, interfiere en el posterior desarrollo y conformación de su dentadura definitiva, y son dolorosas en la mayoría de las ocasiones.

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Un diente cariado que deba ser corregido o removido puede causar alteraciones en la orientación del diente definitivo que saldrá más tarde. A consecuencia de esto, se tendrán que tomar medidas más drásticas de ortodoncia para corregirlo.

Para evitar las caries de biberón es esencial que antes de acostarse se les cepille los dientes a los niños, desde su etapa de bebés

Las caries de biberón… ¿quiénes son los culpables?

En específico, las caries de biberón se deben a la costumbre arraigada de dar la última toma de leche del día justo antes de dormir. Las bacterias que contiene la leche de forma natural son las responsables de la aparición de estas caries, cuando se las deja actuar durante toda la noche.

Para evitarlas es esencial que antes de acostarse se les cepille los dientes a los niños, desde su etapa de bebés. De hecho, debe hacerse costumbre incluso antes de la primera dentición, pues a través de ellas se protegen también las encías. No debe verse como una imposición, sino como una actividad divertida y entretenida, siempre y cuando se utilice una pasta dental formulada especialmente para niños.

Las caries de biberón pueden ser evitadas con una serie de consejos prácticos, entre ellos evitar la toma de leche en la cuna o cama al final del día y la correcta higiene bucal

Esto es una tarea donde la responsabilidad recae en exclusiva en los padres. Por lo menos hasta los 6 años, cuando el niño es lo bastante mayor para cepillarse bien por sí mismo.

Las caries de biberón en los dientes de leche

La prevención de las caries de biberón, no es solo cuestión de proteger piezas que de cualquier forma se van a caer, es básicamente crear los hábitos de higiene bucal. A la vez que el menor comienza a diversificar su dieta, se van cultivando en su boca bacterias que provocan no solo caries, sino también infecciones en las encías y mal aliento.

Por ello, los dentistas recomiendan esmerar el cuidado de los dientes de leche, pues los dientes permanentes se nutren y guían por ellos para reemplazarlos.

Incluso la boca de un recién nacido se encuentra expuesta a residuos de leche y bacterias, que pueden ser eliminados con un cepillo de dedo. Este es un utensilio de silicona que facilita la remoción de restos de la boca del bebé.

Las caries de biberón aparecen en la primera dentición debido a una pobre higiene dental y hábitos alimentarios incorrectos. La prevención es esencial para evitarlas

El peligro real comienza a partir del primer año de vida. Durante este, ya se hace importante para evitar las caries de biberón que el niño tenga su propio cepillo y pasta dental.

Una vez que aparecen las caries de biberón, estas normalmente no se reparan. Pueden hacerse limpiezas dentales, pero no se rellenan ni se extrae el diente enfermo: estos procedimientos se reservan para los dientes permanentes. Por ello, y como las piezas de la primera dentición perduran hasta los 5 o 6 años, tu hijo puede arrastrar sus caries de biberón hasta la edad escolar.

La pasta dental infantil

Tampoco es necesario exagerar la cantidad de pasta que se usa en cada cepillado: una porción similar a un grano de arroz es más que suficiente.

En esta etapa no se debe utilizar pasta de dientes para adultos: a los bebés y niños pequeños no se les da muy bien escupir, por lo que necesitan una pasta infantil que no les afecte. La pasta regular es mucho más fuerte, irritante y contiene más flúor del que se recomienda.

A partir de los dos años, ya sea en la pasta, o en formas que se disuelvan en agua, es importante que se incluya el flúor en la limpieza dental. Este elemento protege y refuerza el esmalte del diente, lo que no solo es una cuestión de estética, sino que impide la formación de caries. Puedes identificarlo en la etiqueta como flúor de sodio, monofluorosfosfato de sodio o fluoruro de estaño.

La correcta higiene bucal contribuye a evitar las caries de biberón, para ello es importante inculcarle estos desde la primera etapa de su vida

Algunos centros educativos administran de forma preventiva sales de flúor disueltas en agua en forma de enjuagatorio, para evitar la aparición de las caries de biberón. Es importante que te informes si al que acude tu hijo tiene esta política.

El carbonato de calcio es otro componente estrella de la pasta dental infantil, que permite remover la placa acumulada en los dientes, junto a manchas causadas por suciedad.

Otro de los elementos que debe contener una pasta dental efectiva contra las caries de biberón es el lauril sulfato de sodio, que actúa como detergente y remueve la placa bacteriana y los residuos de comida.

Para prevenir las caries de biberón

Para evitar que se dañen los dientes de leche, es necesario imponer algunas reglas de higiene bucal al pequeño, como no irse a dormir con la boca sucia y lavarse los dientes después de cada dulce y comida.

Una dieta balanceada y abundante en verduras es también muy importante. En especial, consumir zanahorias es muy bueno para el niño y una forma natural de limpiar los dientes mientras la come. También es importante que consuman alimentos ricos en calcio, que reducen el riesgo de caries formando dientes fuertes.

Los cepillos dentales infantiles deben tener relieves, lo cual facilita que alcancen a limpiar toda la boca. Las cerdas del cepillo deben ser suaves y las puntas redondeadas, para evitar lesiones. Además de los dientes, deben cepillarse también la lengua y las encías. Este procedimiento remueve las bacterias que causan el mal aliento.

No des el biberón de la noche justo antes de dormir o cuando el niño ya tiene mucho sueño o está cansado. La toma tampoco debe darse cuando el pequeño ya está en la cama: es necesario separar el tiempo para que se cepille los dientes antes de dormir. Tampoco es prudente añadir azúcar a la leche.

Si tienes alguna duda sobre la prevención y tratamiento de las caries de biberón debes aclararlas directamente con el dentista pediátrico, el te brindará consejos especializados

Aunque todos estos consejos son válidos de forma general, si tienes alguna duda sobre la prevención y tratamiento de las caries de biberón debes aclararlas directamente con el dentista pediátrico. Él está en la mejor capacidad para despejar cualquier interrogante y establecer el plan adecuado para que tu hijo siempre luzca una sonrisa radiante y sana.

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