Cuando estás embarazada, sobre todo si es la primera vez, todo son dudas y miedos. Te pasas el día preguntándote si esto o aquello es normal, si tu bebé estará bien y si estás haciendo algo que le pueda perjudicar. Todas estas dudas son normales, siempre que no te impidan disfrutar del embarazo y de esta etapa tan bonita, es normal tenerlas y no hay problema en ello. Sin embargo, hay una duda que se repite con mucha frecuencia y de la que no siempre se obtiene respuesta. Muchas sois las futuras mamis que nos habéis escrito diciendo eso de que mi bebé se mueve mucho.
Os surge la duda de por qué puede ser, si es por algo que estés haciendo tú o si es por él, por algún cambio que esté experimentando. Si el bebé se mueve mucho, a priori, no debe ser una mala señal. Sin embargo y para que amplíes información sobre este tema, déjanos que te demos algunos datos sobre lo que provoca que el bebé se mueva, en qué momento de la gestación es normal y cuáles son las señales de alarma a las que debes prestar atención.
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Mi bebé se mueve mucho, ¿es normal?
Respuesta corta: sí. Es absolutamente normal y de hecho es bueno, ya que forma parte de su desarrollo. De hecho, aunque lo normal es empezar a sentirlos en el segundo trimestre, incluso hay mujeres que notan algunos movimientos ya desde el segundo mes de embarazo. En cualquier caso, no te preocupes ni te obsesiones con esto. Si llevas tus revisiones médicas al día y el doctor te ha dicho en todo momento que todo está bien, no te tienes que preocupar. Al igual que los adultos, cada feto tiene su propio ritmo e incluso sus propias particularidades.
Hay niños que se mueven muchísimo y otros que apenas dan un par de tirones en todo el embarazo. Y luego, a la hora de nacer, ambos son niños totalmente sanos y todo está bien. Por eso, es importante que tú mismo sepas reconocer los movimientos de tu pequeño bebé para que sepas lo que es normal y lo que no. De cualquier modo, no te obsesiones con esto, ya que a veces es muy difícil distinguirlo y sobre todo, según el neurodesarrollo del feto, puede cambiar incluso de una semana a otra.
¿Cuándo se empiezan a notar los movimientos?
Como te decíamos, depende de cada bebé y también de la percepción de la mujer. No es lo normal, pero hay quienes experimentan algunos movimientos a partir de la semana siete. En realidad, en este caso se trata de reflejos automáticos. Así que, si notas un pequeño cosquilleo, o incluso lo que muchas mujeres describen como una culebrilla nadando en agua, es esto, reflejos automáticos propios de la formación del feto.
Es a partir de la semana 13 cuando pueden empezar ciertos movimientos algo más notables. De hecho, en la semana 10 el bebé ya tiene brazos y piernas, por lo que es normal sentir algo más. Sin embargo, es a partir de la semana 20 cuando los movimientos son más evidentes. Si estás en este momento del embarazo y lo empiezas a notar cada vez más, no te preocupes, es normal. Tampoco te preocupes si no los notas en estas etapas tempranas, como te decíamos, cada bebé tiene su propio ritmo. De hecho, a partir de la semana 34 es posible que empieces a notarlos cada vez menos. Entre la semana 20 y la 35 el bebé va ganando fuerza y cada vez se mueve más, cambia de postura, y otras actividades que harán que lo notes mucho. Sin embargo, cuanto más grande, menos espacio tiene para moverse y, además, también se producen mayores períodos de descanso.
Mi bebé se mueve mucho… Y de pronto deja de hacerlo
Como ya has ido descubriendo a lo largo de este artículo, los movimientos del bebé van atravesando diferentes etapas a lo largo de la gestación. De hecho, que el niño se mueva suele tranquilizar a la madre, ya que es un claro signo de que hay actividad y que, por tanto, el niño está bien. Ante cualquier duda, recuerda, como siempre, consultar con tu matrona o tu doctor para que te indique si todo es normal o si hay que revisar algo.
Pero, ¿qué sucede que el niño deje de moverse de pronto, si ha sido bastante activo? Como te decíamos, puede ser porque esté comenzando con períodos de descanso más largos o porque se esté quedando sin espacio. Por supuesto, también puede ser un mal síntoma, así que, si esto sucede y no consigues que vuelva a moverse con métodos naturales (a continuación, te contamos cuáles son), te recomendamos que vayas al médico a que te echen un vistazo y te puedas quedar más tranquila. Lo mismo sucede si de pronto se mueve demasiado, si consideras que el ritmo de movimientos es anormal, acude a Urgencias para que revisen si está sucediendo algo a lo que se le deba poner solución lo antes posible.
Cómo conseguir que el bebé se mueva
Si tu bebé se mueve mucho y de pronto deja de hacerlo o si, por el contrario, suele tener poca actividad y tú quieres sentirlo, déjanos que te demos algunas ideas de cómo hacerlo, para conseguir percibir ese movimiento que te va a dejar más tranquila y que te hará sentirte feliz y emocionada por sentir a tu pequeño.
Un truco que funciona muy bien es tomar algo con azúcar. Chocolate, zumos, galletas… El azúcar estimula a los peques y suele ser una técnica empleada en los centros de ecografía, cuando la postura no ayuda a que se vea, por ejemplo, si es niño o niña. Ten cuidado y tampoco te excedas, ni mucho menos lo tomes si te han detectado algún problema de azúcar.
Otro remedio casero para que el bebé se mueva en tu barriga es ponerle música. Puedes ponerla en altavoz, a un sonido que le pueda llegar, y a bailar tú también. No es que baile como tal, pero con la música se ha demostrado que los bebés presentan un mayor movimiento, además de todos los beneficios que tiene.
Otro truco que puede funcionar es utilizar una linterna. Apunta directamente a la barriga y ve moviendo la luz de un lado a otro, de forma suave, suele ser un estímulo que puede funcionar bastante bien, especialmente en etapas más avanzadas de la gestación. Por supuesto, esto solo funciona si está de frente.
Por último, te recomendamos también que pruebes a darte masajes suaves pero constantes. Es una forma de estimular también la barriga y conseguir que el peque tenga un poco más de actividad, tú puedas notarlo y te quedes más tranquila.
Que un bebé se mueva mucho, siempre que esté dentro de lo normal, es algo que te traerá felicidad. Disfrútalo y no te obsesiones todo el embarazo con si estará bien o no. Lo importante es que te cuides durante esta etapa y que la disfrutes como tú bien sabes. Tu peque nacerá pronto y echarás de menos tenerlo dentro de tu barriga.
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