Tal vez no lo sabes, pero ser productivo por la mañana es clave para mantener una buena rutina y que te dé tiempo a hacer todo eso que siempre tienes pendiente. ¿La montaña de tareas por hacer crece y crece sin que parezca que puedas hacer nada? Probablemente tienes mala planificación y organización o, quizá, te estás exigiendo demasiado a ti mismo. Sea como sea, la clave la tienes en ser productivo por la mañana.
Está demostrado que a estas horas del día es cuando el cerebro es capaz de rendir más y mejor y con ello podremos quitarnos mucho antes la tarea que tengamos pendiente y poder disfrutar un poquito de nuestro tiempo libre… O al menos no llevarnos al día siguiente más cosas por hacer que no paren de engordar la bola. Danos cinco minutos y te prometemos que en este tiempo te vamos a dar algunos consejos y trucos para que puedas ser productivo por la mañana y te cunda mucho más el tiempo. Ya depende de ti que los apliques o no, pero, si nos das la oportunidad, te prometemos que notarás resultados. ¡Desde el primer día!
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Madrugar… la primera clave para ser productivo por la mañana
A nadie le gusta madrugar, lo sabemos. Créenos, a nosotros tampoco. Pero el cuerpo al final se termina acostumbrando al reloj que le impongas y te puede hacer mucho bien madrugar, siempre que respetes las horas de descanso. Es decir, si te piensas levantar a las siete de la mañana, no te acuestes a las dos de la madrugada. Trata de llevar una rutina saludable. ¿Por qué es necesario madrugar? Ser productivo por la mañana es mucho más fácil que ser productivo por la noche.
Y la explicación es sencilla: por la mañana estamos recién descansados y con la energía a sus niveles más altos. Aunque tú creas que no funcionas cuando has tenido un madrugón, verás como después de los primeros días (que sí es normal que tengas un poco de más sueño de la cuenta y te notes más cansado), tu cuerpo adoptará unos nuevos biorritmos que te van a ayudar a estar enérgico y con la productividad por las nubes. Hay quienes, incluso, se apuntan al llamado Club de las 5 am, que consiste en levantarse cada día a esta hora. No es necesario tampoco sacrificarse tanto. Pero, con que te levantes a las 7 para estar en marcha a las 7.30, verás como tu productividad aumenta y tu lista de tareas por hacer disminuye.
Hacer ejercicio físico por la mañana también es bueno
Y si has puesto el grito en el cielo porque te hemos pedido que madrugues, seguro que aún más lo vas a hacer si te decimos que es interesante que te plantees la posibilidad de hacer también un poco de ejercicio físico. De nuevo, la explicación se encuentra en que es ahora cuando el cuerpo (aunque no lo demuestre) tiene los niveles más altos de energía, por lo que probablemente rendirás mejor y, además, obtendrás una fuente de concentración natural que te va a ayudar mucho a rendir más en tus tareas del día.
No hace falta que te machaques en el gimnasio. Si vas mal de tiempo o no quieres hacer un ejercicio muy extremo, basta con que hagas una pequeña serie de ejercicios en casa o que bajes a dar un paseo (a intensidad alta) por el barrio. Verás como te activa y cuando te acostumbres sientes que el cuerpo te lo pide solo. Mano de santo.
Para ser productivo por la mañana di no a la tele y sí a la lectura
Un error bastante habitual es que por las mañanas tendemos a encender directamente el televisor, casi en piloto automático, bien para tener un ruido de fondo o bien para informarnos de las noticias. Esto no es malo, pero sí es cierto que la tele, además de ser una fuente de distracciones que puede hacer que no nos concentremos tanto cuando nos pongamos con la tarea diaria, también “adormece” un poco el cerebro y no nos ayudará a obtener esa explosión de energía que necesitamos para poder ser productivos por la mañana.
En lugar de eso, te recomiendo que cojas el móvil y consultes las noticias del día en un único periódico, por un período de tiempo no superior a diez minutos. Si puedes conseguir un periódico en papel (por ejemplo, si cumples con lo de bajar a dar un paseo por el barrio), aún mejor. Aunque, el mejor de los casos, es que tengas a mano un libro y cada mañana leas un capítulo. Un único capítulo. Esta actividad, de apenas 5-10 minutos, te va a ayudar a elevar tus niveles de concentración y a despertar el cerebro para rendir más.
La ayuda de la agenda: el secreto para ser más productivo por al mañana
Otro de los trucos inconfesable que apenas te ocuparán 5 minutos es que dediques este tiempo a escribir en una agenda (ya sea digital o en papel) tus objetivos del día. No solo te ayudará a no olvidarte de nada, si no que podrás establecer un objetivo REALISTA sobre lo que quieres hacer con tu tiempo, las obligaciones pendientes e incluso los pequeños caprichos que te quieres dar.
Otra opción, si te vas acordando de cosas a lo largo del día, es que dejes esto preparado por la noche y por la mañana simplemente la abras, mires lo que tienes pendiente y establezcas el orden en el que lo vas a trabajar para poder sacarle más partido a tu tiempo y conseguir llegar finalmente a todo. Tener una agenda, aunque para algunos es básico, para otros es casi una utopía, pero son increíbles los beneficios que pueden llegar a tener sobre la gestión del tiempo y la resolución de tareas. Si ya la usabas, ¡enhorabuena! Seguro que estás de acuerdo con nosotros. Y si no lo has hecho aún, es un buen momento para empezar a utilizarla.
Prepara tu cuerpo y tu hogar
Además de dedicar 5 minutos a la lectura, otros 5 a la planificación de las tareas, aproximadamente 20 minutos para hacer ejercicio y otros 10 minutos a desayunar, te pedimos que los otros 20 minutos que te faltan para completar una hora desde que te has levantado los dediques a mimarte. ¿Cómo? Vístete (no te quedes en pijama, aunque teletrabajes o no tengas actividades que hacer fuera de casa) y date una ducha rápida.
Haz la cama y recoge lo poco que hayas podido desordenar en el rato que llevas levantado (para ello tendrás que haber dejado la casa recogida por la noche, pero ese es otro hábito que te nombraremos en otro artículo). Con esto, conseguirás sentirte en paz y en calma contigo mismo y con el ambiente que te rodea y lograrás ser más productivo durante todo el día, no solo por la mañana. Aunque no lo creas, no rendimos igual si la casa está hecha un desastre o si nosotros estamos desaliñados. Toma una rutina y cúmplela. Aunque al principio te cueste, verás como esta es una hora muy bien invertida que, tal vez, antes simplemente la gastabas retrasando la alarma.
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