El Test del árbol es un gráfico creado por Karl Koch, empleado comúnmente para diagnosticar rasgos de personalidad tanto en niños como en adultos. Esta es una manera en la que la persona se proyecta con más libertad que si tuviera que escribir lo que siente.
En las líneas, trazos, el contorno del árbol y del paisaje resulta mucho más fácil determinar cómo se proyecta el individuo ante el mundo, cómo se siente y esencialmente cómo se concibe a sí mismo.
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El autor seleccionó el árbol para basar su análisis porque el mismo en casi todas las culturas está asociado con la vida. La solidez de su tronco y raíces con su propia permanencia y su frondosidad y follaje en su propia vida. Tiene un gran simbolismo y es parte de la mitología y las creencias populares.
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Forma de aplicación del Test del árbol
El Test del árbol se puede aplicar en cualquier etapa de la vida, aunque fue diseñado para que los niños pequeños entre 5 o 6 años revelen sus rasgos de personalidad. Para aplicar este test, con sólo una hoja de papel, un lápiz y goma de borrar es suficiente.
La persona debe sentirse libre y sin presión para dibujar un árbol como guste, tomando todo el tiempo que quiera. Puede pedírsele que dibuje otro árbol diferente: esto permite valorar patrones discordantes, o que se repitan en ambos dibujos y obtener un resultado más confiable.
¿Cómo interpretar el Test del árbol?
Aunque para sacar conclusiones definitivas son necesarios más análisis, el Test del árbol es fácil de interpretar de forma empírica. Pídale a la persona qué (o usted mismo antes de seguir leyendo) dibuje un árbol como lo desee. Luego, analice los siguientes aspectos:
La hoja y su división ideal
Existe una división ideal del espacio relacionada a las zonas utilizadas en el papel.
En la zona superior: asociada a lo espiritual e intelectual.
Cuando es en la zona mediana: relativa a la sensibilidad y los afectos.
Si emplea la zona centro izquierda: relacionada a el pasado, el yo dirigido de forma regresiva.
Si se trata de la zona Centro derecha: Proyección hacia el futuro, el tú, las expectativas y el futuro.
En la zona inferior: Dirigida hacia lo material e instintivo, el subconsciente.
El dibujo del árbol en conjunto
El dibujo en sí, tiene similitud con el cuerpo: la copa es la cabeza, el tronco identificado con el cuerpo humano, y la raíz con las extremidades inferiores. Para que este test sea efectivo todos estos componentes se analizan conjuntamente.
El tamaño del árbol
Cuando el árbol es grande señala una apropiada autoestima. Si el dibujo es pequeño indica sentimientos de inferioridad o modestia. Si el dibujo es muy grande, indica vanidad o sentimientos por superar.
El suelo
Árbol sin suelo indica: inestabilidad emocional, desarraigo y sin apoyo.
En forma de colina: egocentrismo y desconfianza.
Ascendente: reserva e inadaptación.
Descendente: falta de voluntad.
Las raíces
Las raíces en la base del tronco indican seguridad y buen estado emocional. Cuando no se dibujan raíces y el niño es pequeño, denota fragilidad y miedo.
El tronco
Tronco estrecho, irregular y bajo: muestra un carácter influenciable y aprensivo.
Débil: indica problemas emocionales
Tronco con agujero en el centro: denota maltrato y carencias afectivas.
Recto: Rigidez, autocontrol, disciplina, reserva.
Tronco ondulado: Flexibilidad, sociabilidad.
Retorcido: sufrimiento, culpabilidad y ansiedad.
Bajo: carácter introvertido y acomodaticio, expectativas bajas.
Alto: proyección extrovertida, ambición e idealismo.
Tronco ancho en proporción al árbol: Equilibrio, planificación, templanza, seguridad y autocontrol.
Tronco delgado y con una línea: Inestabilidad, inseguridad, timidez y pensamiento rígido.
Grueso: autoridad, energía y seguridad. Muy grueso indica rasgos de narcisismo, autoritarismo y agresividad.
Grueso arriba: idealismo, espiritualidad y concentración.
Grueso abajo: carácter tranquilo y materialista.
Ancho en el medio: impulsividad y poco autocontrol.
Estrecho en el medio: Inhibición y represión.
Inclinado hacia la derecha: extrovertido, sociable y según el dibujo, irreflexión e impulsividad.
Tronco hacia la izquierda: Introversión, conservadurismo, rutinario, retraimiento hacia lo nuevo.
Tronco de una pieza (11 a 12 años): bajo nivel de empatía, inseguridad, funcionalmente básico.
Abierto en la base: Impulsividad, inestabilidad emocional (según el dibujo) agresividad.
Tronco en forma angulosa: Carácter irritable y susceptible
Las ramas y la copa
El tronco y las ramas se relacionan a la estabilidad. Las ramas, las hojas y copas del árbol revelan interacción social. La dirección de las ramas indica estados anímicos y conflictos.
Ramas hacia arriba: optimismo y extraversión.
Ascendentes: indican deseo de superación, crecimiento e interacción. pero, si son en forma de punta o aserradas señalan impulsividad y agresividad
Ramas hacia abajo: pesimismo, desamparo y desasosiego. Cuando son refinadas y detallistas se asocia a personas sensibles y melancólicas.
Ascendentes y descendentes simultáneamente: baja autoestima, dependencia emocional y variabilidad.
Ramas cruzadas y angulosas: impulsividad, poca tolerancia a la frustración, conductas extrovertidas y de crítica.
Ramas y ramificaciones delgadas: sencillez, sensibilidad. Si son finas y sin hojas indican timidez.
Ramificaciones gruesas: seguridad, optimismo y constancia. Si son bifurcadas indica imaginación y plasticidad.
Ramas abiertas: extraversión, análisis objetivo e iniciativa, y según los trazos, impulsividad.
Cerradas: introversión, auto-protección dirigida hacia el mundo externo.
Ramas cortadas: indican baja auto-estima y dificultades para relacionarse afectivamente.
Desde el tronco: en los adolescentes, indica sexualidad en desarrollo y búsqueda de identidad.
Copa pequeña: persona introvertida, tímida y temerosa al mundo exterior.
Grande: extroversión, imaginación, idealismo, aspiraciones. De ser muy grandes indican exceso de fantasía, narcisismo, vanidad, exhibicionismo y soberbia.
Copa proporcionada: persona equilibrada, reflexiva, realista, y detallista.
Copa con trazos ondulados: indican adaptabilidad y paciencia. Si las ondulaciones son concentradas señalan necesidad de espacio personal y selectividad social.
Aplastada en zona superior: desesperanza, sumisión e indefensión ante presiones externas.
Copa en forma angulosa: Introversión, terquedad, polémica, impulsividad y poco autocontrol.
Otros elementos
Sombreado: muestra sensibilidad e inclinación artística, si el sombreado es muy oscuro, indica culpabilidad o remordimiento.
Manchas o heridas: carencias emocionales, maltrato físico o sicológico.
Follaje: según la edad, indica inteligencia, concentración, aptitudes plásticas y carácter obsesivo.
Follaje irreal: carácter caprichoso, dirigido hacia la fantasía y a la evasión.
Hojas cayendo del árbol: sensibilidad, melancolía, timidez, susceptibilidad, impulsividad, intolerancia hacia la frustración y dependencia emocional.
Frutos: señalan productividad, altruismo, sociabilidad y capacidad para lograr propósitos.
Frutos en el suelo: decepción, añoranza y temor.
Animales y sol: los animales simbolizan un ambiente afectivo, el sol simboliza el padre y señala la necesidad de cariño o cuidado.
Adornos: característicos del universo infantil, humorismo y mordacidad.
Paisaje: comunicación, fantasía y deseo de escapar de la realidad.
Si deseas ampliar el conocimiento sobre la interpretación de los resultados del Test del árbol te invito a visitar información especializada en el diagnóstico psicológico que te ayudarán a un conocimiento más profundo de la personalidad de tu hijo.
El índice de Wittgenstein y eventos traumáticos
Graf Wittgenstein hizo un aporte importante a la interpretación del Test del árbol al proponer la teoría de que al dibujar el árbol, también las personas podían reflejar la ocurrencia de algún conflicto en su desarrollo y que era representado de una forma que podía indicar la edad en que el mismo ocurrió.
Por ejemplo pudiera ser que plasmara un agujero en su tronco, una rama a determinada altura u otra señal que indicara una disrupción. El índice de Wittgenstein (IW) consiste en medir la altura máxima del árbol en milímetros desde la base y dividirlo entre la edad de la persona. Posteriormente se miden los milímetros desde el suelo hasta el lugar donde aparece el accidente y se divide entre el IW previamente descrito. El resultado obtenido será la edad estimada del conflicto.
Y por último…
La evaluación de la personalidad y el desarrollo psicológico son temas que requieren de especialización y una sola prueba no es suficiente para revelar la complejidad y la dinámica de los problemas asociados con la personalidad y la conducta. Si notas que tu hijo comienza a manifestar problemas desde edades tempranas debes estar muy atenta y acudir a los especialistas capacitados para evaluar, diagnosticar y atender el desarrollo psicológico de tu hijo.
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