El embarazo genera infinidad de cambios en el organismo, no tan solo en la conformación de tu cuerpo y en el desarrollo de tu bebé, también desde el punto de vista fisiológico. Las profundas transformaciones en la producción hormonal afectan los diferentes órganos y sistemas provocando diversas molestias. Entre las más comunes se encuentran los ardores en el embarazo.
En este trabajo: Molestias del embarazo, son normales pero atiéndela
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¿Cuáles son los ardores en el embarazo más frecuentes?
Los ardores en el embarazo más comunes se localizan en el estómago, en la pelvis, al orinar y en la vagina. Todos tienen una explicación y están estrechamente relacionados con las transformaciones hormonales normales que se producen durante esta maravillosa etapa de tu vida.
Estos cambios hormonales son los que permiten que ovules, fecundes, desarrolles el embarazo y se produzca felizmente el parto. Pero no todo es color de rosa, también ellos están asociados a algunas molestias como los ardores en el embarazo. Si quieres conocer el por qué se producen continúa leyendo.
Ardores en el embarazo por acidez estomacal
Los ardores en el estómago es sin lugar a dudas la causa más frecuente que originan los ardores en el embarazo. Se estima que entre el 50-70% de las mujeres los padecen. En términos médicos se conoce esta molestia como pirosis y se caracteriza por una sensación de que algo te quema en el abdomen superior, puede sentirse hasta el medio del pecho y hasta en ocasiones te llevan a pensar que el corazón te duele.
En condiciones normales una vez que has ingerido alimentos, estos pasan del estómago y posterioremente al intestino delgado, pero en ocasiones este tránsito se desarrolla inversamente y el contenido gástrico regresa al esófago. Esto es llamado reflujo gastroesofágico. La sensación de ardor o acidez se produce porque este órgano no está preparado para enfrentar un contenido tan ácido.
Los ardores en el estómago son producto de varios factores. Por una parte las elevadas concentraciones de progesterona en sangre ejercen su efecto sobre la musculatura lisa alrededor del cardias provocando que no cierre completamente. Cardias es el nombre de la válvula que se encuentra entre el esófago y el estómago. Esto favorece el paso de los jugos gástricos hacia el esófago. Por otra parte el crecimiento del útero ocasiona un desplazamiento del estómago y el diafragma hacia arriba lo que facilita el reflujo de su contenido hacia el esófago.
El ardor en el estómago, es más frecuente que se presente en el tercer trimestre del embarazo, pero la mayoría de las mujeres lo experimentan desde los primeros trimestres.
Ardor en la zona pélvica
Numerosas mujeres experimentan ardores, punzadas o discretos dolores en la zona pélvica o sea en la parte baja de abdomen. Estas molestias se ocasionan porque entre las transformaciones cardiovasculares que se producen durante el embarazo está el aumento del flujo sanguíneo uterino. Las capas de músculo que rodean los vasos sanguíneos reaccionan ante este aumento y se contraen.
También cuando el útero va creciendo los ligamentos que lo recubren se van haciendo más flexibles y se van estirando. Lo anterior puede provocar una sensación de ardor en la zona pélvica, en otras ocasiones se manifiestan como punzadas o calambres. Son más frecuentes al realizar determinados movimientos. Si estas molestias son ligeras no tienes por qué preocuparte porque son parte de las molestias normales del embarazo. Las mismas son más frecuentes a partir del segundo trimestre.
Ardor al orinar durante el embarazo
Como previamente mencionamos uno de los cambios hormonales más característicos del embarazo es la producción de progesterona. Los niveles elevados de esta hormona actúan sobre los músculos de la vejiga y los conductos que permiten la excreción de la orina del riñón a la vejiga (uréteres). Lo anterior ocasiona que el paso de la orina sea más lento. Esto facilita el crecimiento y multiplicación de las bacterias que pudieran estar presentes en la orina.
La situación antes descrita se puede dificultar aún más durante el avance de la gestación porque el propio aumento del tamaño del útero puede provocar una compresión de los uréteres y de la vejiga y conducir a un enlentecimiento del paso de la orina.
Si además la embarazada está sufriendo de diabetes gestacional, todavía será más propensa a tener infecciones urinarias a repetición. Uno de los primeros síntomas de las infecciones de las vías urinarias bajas como la cistitis es el ardor al orinar. Esta sensación de quemazón puede ser extraordinariamente molesta y permanece inclusive después de orinar.
¿Es normal el ardor en la vagina durante el embarazo?
La sensación de ardor o picor en la vagina es una molestia frecuente en el embarazo. Cuando se presenta en cualquier trimestre de la gestación por lo general está asociada a infecciones vaginales.
La candidiasis es la causa más frecuente de ardor vaginal, este hongo que normalmente se encuentra en la vagina sin producir infección, se reproduce excesivamente ante determinadas condiciones.
Uno de los factores que motiva una mayor frecuencia de infecciones vaginales es el propio embarazo. Por una parte se produce un aumento del flujo vaginal y por otra los cambios hormonales normales de una gestación la propician.
Es completamente normal que la embarazada tenga un aumento del flujo vaginal incoloro o blanquecino, fundamentalmente al inicio y al final de la gestación. Este flujo no provoca por si solo ardor en la vagina.
Si aparece picor, comezón o ardor vaginal y además la coloración del flujo vaginal se modifica y se torna amarillenta, verdosa y con mal olor es muy probable que se trate de una infección vaginal.
Y debes tener presente…
Los ardores en el embarazo ocasionados por la acidez gástrica pueden ser aliviados, con los pélvicos debes aprender a convivir. Cuando son producidos por infecciones urinarias y vaginales las mismas deben ser tratadas.
Pero, siempre recuerda… ante ardores en el embarazo, no te automediques, siempre consulta con tu ginecólogo, numerosos medicamentos pueden ejercer efectos muy negativos sobre el bienestar de tu bebé.
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