Cómo ayudar a tu hijo al pasar al cole de mayores

La etapa de colegio es sin duda preciosa y la mayoría de nosotros la recordamos con mucho cariño. Esto es gracias a que hemos sabido quedarnos con lo bueno (los profesores que nos marcaron, los amigos con los que todavía tenemos contacto, los juegos que aprendimos en el patio del recreo…). Sin embargo, a todos se nos ha olvidado ya cómo eran los primeros días, especialmente en las edades más tempranas. Las lágrimas son una constante en la puerta del colegio y, aunque hay algunos niños que lo llevan mejor que otros, prácticamente todos tienen que sufrir un período de adaptación al pasar al cole de mayores.

La “guardería” o jardín de infancia es un lugar donde apenas son conscientes de dónde están y donde la prioridad es el cuidado de los bebés, pero al pasar al denominado “cole de mayores”, tu hijo, que apenas cuenta con tres años, notará un cambio bastante grande.

Tu labor como madre o padre es ayudarle en esta nueva etapa de su vida, como harás en todas las demás. ¿Cómo hacerlo? En este artículo te queremos dar algunos consejos para que la entrada en el cole sea más llevadera (para ambos).

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Consejos para llevar mejor la entrada al cole de mayores

No le des más importancia de la que tiene

En ocasiones, somos los adultos los que le damos una importancia exagerada a las cosas y transmitimos miedos que los niños no tienen. No pases el día hablando del cole, ni hagas que toda su vida gire ahora en torno a él. Sí, tu hijo ya tiene su primera obligación y responsabilidad, pero él no lo ve así (o, al menos, no debería verlo así). Dale el mismo tratamiento que le dabas a dejarlo en casa de los abuelos o a llevarle a la guardería.

Lo importante es que él no sienta un cambio demasiado grande entre lo que venía haciendo hasta ahora y el cole de mayores. Si lo percibe así, se asustará y le cogerá un cierto recelo, así que ya sabes, ayúdale y escúchale, pero no centres todas tus conversaciones y recomendaciones en torno al colegio. Sigue teniendo vida fuera de él.

Recuerda que eres su reflejo

Al hilo de lo que acabamos de mencionar, si él te ve inseguro/a, preocupado/a o nervioso/a, tu hijo también lo estará. Le pasarás los nervios, los miedos y las inseguridades y las volcará en el colegio.

Por tanto, en este punto buscaremos que trabajes en ti. Sabemos que como padre o madre quieres lo mejor para tu pequeño y que te preocupa todo en una proporción enorme, es normal, es lógico y es sano. Pero no puedes ser tú quien se agobie más que el propio niño por la entrada al cole de mayores. Todos hemos pasado por él y todos lo hemos superado con éxito. Si ve que te afecta, lo interpretará como algo negativo y le afectará a él también. Así que no le des más importancia que la que tiene y trata de estar relajado/a cuando le dejes en la puerta del cole, con una gran sonrisa, mucha seguridad y sin lágrimas. La misma escena debe repetirse al recogerle. No hagas como si llevaras sin verle cinco años o le pasarás una especie de sensación de “abandono” que no le va a beneficiar nada en los días sucesivos.

Trata de cuadrar una rutina de horarios

Algo que sí debe cambiar con la llegada del cole de mayores es sus horarios. Ha llegado el momento de que el niño tenga una rutina, especialmente en lo referente a una rutina de horarios y de comidas. De este modo, sabrá seguir unos patrones y conseguirá incorporar el colegio como algo natural en su día a día.

A nadie le gusta la rutina, lo sabemos. Pero para los peques es importante seguirla para que aprendan a colocar todo en su vida. Cuando sean mayores, ellos mismos decidirán como vivir y cómo toleran la rutina, pero en estas edades es importante que mantengan siempre más o menos estable un horario para comer, para jugar, para dormir y para estudiar. No solo le beneficiará a nivel psicológico, también aprenderán a ser más ordenados, metódicos e incluso su salud se verá beneficiada, ya que seguirán unos horarios lógicos, conseguirán descansar mejor y tendrán buenas digestiones, entre otros efectos positivos.

Haz cosas divertidas después del cole

Pero ojo, porque llevar una rutina no significa que la vida que tu hijo o hija se convierta en un aburrimiento. ¡No! Recuerda siempre que los niños necesitan desarrollar su creatividad, su imaginación y gestionar su tiempo libre de una forma que realmente disfruten con él… Como los adultos, vaya.

Por eso, sigue planteando opciones divertidas para después del cole. A veces, simplemente con bajar al parque a que juegue con otros niños le puede ser suficiente. Pero si está muy cansado, si no tienes un parque cerca o si hace mal tiempo y se imposibilita el hecho de bajar, entonces llega el momento de hacer alternativas. Pero siempre que sean divertidas. Lo que queremos transmitirte con esto es que no debes caer en el error de que tu niño pase las mañanas en clase y las tardes enteras en actividades extraescolares o haciendo los deberes en la mesa de casa. Está bien que tenga obligaciones y responsabilidades, sin duda, pero si quieres que su llegada al cole de mayores sea más sencilla, debes demostrarle que en la vida también hay tiempo para disfrutar. ¿Te recordamos algo? Los niños, como más disfrutan, es haciendo algo común con sus seres queridos. Así que no, no sirve que conectes Netflix o que le des el Tablet para que pase la tarde entretenido por sí solo. Esto, como padres o madres, a veces se nos olvida, pero es muy importante que lo tengamos siempre presente y que tratemos de darles a nuestros peques el mayor tiempo posible de calidad.

Conviértelo en un juego

Y por último, una mezcla de todo lo que hemos dicho hasta ahora se resume en esto. Son niños y necesitan jugar, necesitan vivir la vida como si fuese un juego todo lo que hacen. Ya tendrán suficiente tiempo para gestionar las preocupaciones y problemas cuando sean mayores.

Así que está en tu mano hacerle ver que el cole de mayores es un juego. Los profesores tienen mucho que decir en esto, pero tú también. ¿Cómo se lo puedes transmitir? Las palabras con las que te refieras al colegio van a marcar la percepción que él o ella tenga del centro, pero también puedes hacer que el cambio hasta el centro sea divertido, incluyendo algún juego, o incluso que hacer los deberes se convierta en un momento especial y donde el niño, sin saberlo, esté aprendiendo a la vez que piensa que simplemente es un juego más como cualquier otro de los que ha hecho hasta ahora. Ten en cuenta que el cole de mayores, aunque se llame coloquialmente así, no deja de ser un cole para niños, y más a estas tempranas edades, siempre se busca el aprendizaje por medio del entretenimiento. Haz tú lo mismo en casa.

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