Futura mamá: estas son las emociones en el embarazo

Tu bebé puede sentir las emociones en el embarazo desde que está en el vientre. Lo que sientes puede afectar el desarrollo del pequeño. Esto ocurre por la conexión que existe durante la gestación, pues permite se fusionen pudiéndose entender, conocer y sentir.

Las emociones experimentadas por la madre liberan hormonas que por medio de la placenta llegan al feto. Esto influye en el cambio del sabor en el líquido amniótico. Además el bebé se guía por los ritmos cardíacos, respiración, tono de voz y caricias de la madre. Cada expresión afecta la vida que se está formando.

Cuáles son efectos futuros de las emociones para el bebé

Aunque no lo creas las emociones influyen a largo plazo el desarrollo del niño. Todas las sensaciones quedan en la memoria por lo que su personalidad y comportamiento pueden estar definidos por este hecho. Sin embargo, la placenta los protege el estrés, miedos o angustias severas que presenta la madre.

Las emociones en el embarazo y sus etapas
Las emociones experimentadas por la madre liberan hormonas.

Dale la bienvenida a las hormonas

Irónicamente, esas elevadas hormonas son las mejores amigas de una mujer embarazada y la vida de su bebé. La gonadotropina coriónica humana o hCG aumenta bruscamente en el primer trimestre, luego baja y nivela alrededor de cuatro meses. Esta mantiene al embrión implantado en el revestimiento uterino.

La progesterona y el estrógeno (que aumentan a lo largo de los nueve meses) ayudan a mantener el embarazo y causar la acumulación de vasos sanguíneos nutritivos. Esta cantidad de hormonas beneficiosas para el bebé están relacionadas con emociones en el embarazo como  el mal humor y llanto. Además de causar náuseas matutinas gracias a la progesterona y el estrógeno.

Emociones sanas, embarazo feliz

Etapa preconcepcional

Tanto la madre como el padre deben prepararse mental y físicamente para la llegada de un embarazo. Instaurar hábitos de conductas saludables es crucial durante este periodo. 

Etapa gestacional

Hay embarazos que no son planificados, pero son deseados y otros que son planificados y deseados. En esos casos la pareja debe trabajar las actitudes hacia la maternidad. Especialmente si ocurre durante la adolescencia o con precariedad económica. Dependiendo de las condiciones en las que se desarrolle se determina cómo ayudar a la madre.

Cuando los embarazos son planificados y deseados se toma en cuenta cómo ayudar a los padres con los temores más comunes. Suelen preocuparse por la salud del bebé o un posible aborto espontáneo. Es importante que durante esta etapa se tomen el tiempo de adaptarse y afrontar de manera positiva la situación.

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Etapa postnatal

Esta puede ser una de las etapas más difíciles, donde la ansiedad y hasta la depresión puede aparecer. Tener asesorías de especialistas médicos sobre los cuidados del bebé y la lactancia materna puede ayudar a tranquilizarte. Adicionalmente el cuerpo pasa por muchos cambios físicos que afectan tus emociones y de igual manera se transmiten cuando le das pecho.

Emociones negativas má peligrosas

Saber cuáles son las emociones negativas que transmitirás a tu bebé puede ayudarte a mantenerlas a raya. Recuerda que solo tú tienes el poder de controlar cómo te sientes y ofrecer bienestar al feto.

Miedo

Cuando los embarazos son productos de abuso sexual o violencia doméstica puede existir el miedo en la madre. Si padre y madre se mantienen peleando y gritando el feto puede agitarse. El trato que el padre le dé a la madre afecta la salud del pequeño.

Distintas emociones en el embarazo
Los pensamientos productivos son los encargados de generar endorfinas.

Tristeza

La tristeza es una de las emociones en el embarazo que perjudican la salud del bebé y la madre. si los niveles de tristeza son agudos se presentan problemas de sueño, presión alta y digestión. También se asocia a la depresión del infante durante la vida adulta.

Ira

Sentir ira contribuye a la aceleración del ritmo cardiaco y la alta presión arterial que pueden presentar la madre. Esto ocasiona que los vasos sanguíneos se contraigan, redUciendo el oxÍgeno del bebé y provocando inconvenientes en el suministro de sangre debido a la presencia de este sentimiento.

Estas emociones en el embarazo traen consigo respuestas físicas y psicológicas en el niño, tales como:

Estrés

Cuando la madre le transmite al bebé tristeza, intranquilidad o rabia se activa el sistema endocrino del bebé. El desarrollo cerebral se puede ver afectado considerablemente. Todo estolo pone en riesgo de padecer depresión en la adultez. Practicar yoga, alimentarte bien y cuidarte pueden aminorar estas sensaciones no deseadas.

Sufrimiento emocional y físico

Tratar de controlar los pensamientos negativos es tan importante como mantener la salud física. El bebé puede sentirse alarmado, lo que podría ocasionar que nazca antes de tiempo y causar sufrimiento en el vientre. Si la madre es sometida a cirugías para salvar la vida del niño o corregir anomalías el bebé siente el dolor.

Emociones en el embarazo que sí son positivas

  • Felicidad.
  • Tranquilidad.
  • Emoción.

Estos son los tres sentimientos más importantes que debes cultivar durante el embarazo. Los pensamientos productivos son las encargadas de generar endorfinas. Esto traerá al bebé bienestar, favorecerá su ritmo cardiaco y beneficiará la buena oxigenación. Utiliza frases positivas para tu bebé y reafirma su amor.

Las caricias en el vientre tanto de la madre como del padre, los masajes y conversaciones son fundamentales durante el vínculo. Esto ayudará a que el feto se sienta protegido, confiando plenamente en ti. Disfrutar de actividades relajantes, reír, escuchar música agradable te permitirá transmitir sensaciones positivas al bebé.

Diversas emociones en el embarazo
Solo tú tienes el poder de controlar cómo te sientes.

¿Cómo controlar tu estado de ánimo?

Hablar con otras mamás o amigas embarazadas puede ser bueno para compartir anécdotas. Las emociones en el embarazo quizá te descontrolen, por lo que debes mimarte a ti misma, hasta darte masajes de embarazo.  

Conversa con tu pareja para que él también te ayude, e incluso invítalo a las clases de yoga. Si es necesario busca ayuda profesional, ten en cuenta que este es un proceso que solo dura nueve meses y pronto tendrás a tu pequeño contigo.