Los adolescentes son más propensos a tener embarazos no deseados, sobre todo por el desconocimiento del uso correcto de los métodos anticonceptivos, o simplemente por no usarlos durante sus relaciones sexuales.
Muchas veces los adolescentes manifiestan vergüenza en relación a comprar anticonceptivos o solicitar consejo médico sobre los métodos más efectivos. También los jóvenes utilizan el condón de forma incorrecta y en el caso de las muchachas olvidan con frecuencia tomar las píldoras anticonceptivas.
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También los padres, que se encuentran en la obligación de ofrecer información sobre educación sexual, sexualidad y los mejores métodos anticonceptivos en los adolescentes a sus hijos, no tocan estos temas por vergüenza o desconocimiento.
Un mayor nivel de comunicación, información y confianza puede evitar que se produzcan embarazos indeseados en estas edades. El papel de los padres en la preparación de sus hijos para ese momento es fundamental.
Según los últimos datos disponibles en España entre el 60 y el 90% de los embarazos antes de los 19 años son no deseados.
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Conociendo los métodos anticonceptivos
Los métodos más conocidos se reducen al tradicional retiro del muchacho antes de eyacular, el uso del condón y las píldoras anticonceptivas. Pero existen muchos más anticonceptivos, que son de amplio uso entre las personas sexualmente activas y pueden ser empleados con efectividad.
Los métodos anticonceptivos más recomendados
Entre los mejores métodos anticonceptivos en los adolescentes, los más recomendados son aquellos que por su acción y efecto en el cuerpo sean menos invasivos. Ejemplos de ello son, el uso de píldoras anticonceptivas y el uso de condón. Lo más recomendable es utilizar ambos métodos, pues si bien las píldoras previenen un embarazo indeseado, ni son 100% efectivas ni protegen contra las enfermedades de transmisión sexual, incluidas la hepatitis B, la sífilis, gonorrea y el VIH.
Métodos anticonceptivos reversibles a largo plazo
Existen métodos de anticoncepción conocidos como reversibles a largo plazo, entre ellos los dispositivos intrauterinos o DIU, muy empleado a nivel mundial por las mujeres en edad fértil. Tiene como característica que permanece en el útero, y puede mantenerse entre 3 a 12 años, por supuesto mientras no se desee el embarazo. El ginecólogo es el único capacitado para colocarlo o retirarlo.
Los DIU en ocasiones pueden provocar efectos secundarios, pues contienen cobre y níquel, por lo que existe riesgo de que ocasionen alergias y afecciones como urticaria, inflamación pélvica y dermatitis. En tales casos se retira el DIU obligatoriamente y se procede a utilizar otro método anticonceptivo.
Anticonceptivos subcutáneos
Otro método muy empleado es el anticonceptivo subdérmico, conocido también como implante anticonceptivo subcutáneo. Se trata de una varilla pequeña que se implanta debajo de la piel y ofrece un margen de efectividad de unos tres a cinco años. Su efecto es liberar progesterona de forma controlada y, en comparación a la píldora y al parche anticonceptivo, proporciona mayor efectividad y seguridad, pues al estar insertados no existe posibilidad de olvido.
Los anticonceptivos subcutáneos pueden provocar efectos indeseados. Entre los más comunes está la alteración en la menstruación, el aumento de peso, la aparición de acné, algunas complicaciones a la hora de retirar el implante. También puede ocurrir con las inyecciones contraceptivas.
Anticonceptivos de barrera
Es muy recomendable utilizar más de un método anticonceptivo, pues disminuye el riesgo de un embarazo no deseado. Entre ellos están los anticonceptivos de barrera, que son muy comunes y fáciles de adquirir. Estos previenen de embarazos no deseados impidiendo que el semen penetre físicamente en el útero. Los anticonceptivos de barrera son los condones masculinos, los condones femeninos, diafragmas y esponjas espermicidas.
Los condones son quizás el anticonceptivo de barrera más popular, debido a su bajo costo, su fácil empleo y no tener prácticamente ningún efecto adverso.
Píldora del día después
Un método anticonceptivo de emergencia muy recomendado es píldora o pastilla del día después, también conocida como la píldora de Postday, contiene hormonas que actúan impidiendo la liberación del óvulo y evita que los óvulos se fertilicen. Al no poder ser fertilizados porque no hay ovulación o porque los espermatozoides no pueden llegar al mismo se evita el embarazo.
Es muy recomendada esta práctica, no de forma sistemática, solo en casos esporádicos o de emergencia. Como es el caso de olvido al tomar la píldora anticonceptiva clásica, cuando se produce una violación o cuando no se ha utilizado protección durante la relación sexual. Tiene muy pocos efectos secundarios, entre los que se encuentran las náuseas y vómitos, que desaparecen en breve. Las hormonas que contiene esta pildora se eliminan con facilidad a través de la orina.
Otros anticonceptivos
El método de anticonceptivo hormonal, incluye desde las píldoras orales hasta inyecciones y parches. Existen dos clases de píldoras anticonceptivas orales, las orales combinadas (que contienen estrógeno y progesterona) y las que sólo contienen progestágeno. Ambas por igual son eficaces y su único riesgo es que la muchacha olvide tomar la píldora.
El mejor de todos los métodos anticonceptivos en los adolescentes
Además de todos los métodos anticonceptivos antes mencionados, el mejor de todos siempre será la información y la prevención. Las adolescentes deben conocer los riesgos a los que se exponen en el caso de quedar embarazadas.
Entre los que causan más morbilidad se encuentran la preeclampsia y eclampsia, el bajo peso del feto, desnutrición, el uso de fármacos, el tabaquismo y el consumo de drogas o alcohol. La mortalidad materna en la adolescencia es frecuente pues el aparato genital de las muchachas no se encuentra preparado aun para enfrentar la gestación. Pueden presentar embolias, enfermedad hipertensiva y embarazos ectópicos.
Las adolescentes que han ocultado el embarazo por temor a sus parejas o a sus padres, por lo general se someten a procederes médicos altamente invasivos y peligrosos con un método anticonceptivo más, con una tranquilidad que muchas veces parece pasmosa. Ni la llamada regulación menstrual, ni el aborto, son inocuos ni recomendables.
Estos deben ser el último recurso, por el riesgo a que se expone la adolescente. Como maniobras invasivas, pueden provocar hemorragias y sepsis o el instrumental puede dañar sus órganos internos, provocando una posible infertilidad.
Todo ello va unido a que las muchachas de bajos recursos, en muchos países de Latinoamérica, recurren a personas inescrupulosas que, sin ningún tipo de licencia médica y en condiciones precarias, realizan estos procedimientos, casi siempre con resultados funestos.
Por estas razones, y sin lugar a dudas el mejor método anticonceptivo en los adolescentes es la prevención, la información y el apoyo de los padres, que deben brindar confianza para que sus hijos les comenten sus inquietudes y adoptar con responsabilidad, una relación sexual satisfactoria y protegida.
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