¿Estás en el segundo trimestre de tu embarazo y tu médico te indicó realizar el test de Sullivan? En realidad se trata del test de O´Sullivan o prueba de la diabetes gestacional, destinada a detectar los niveles de glucosa en sangre y descartar la presencia de esta complicación del embarazo. Esta prueba debe realizarse a todas las embarazadas y se realiza dos veces si se encuentra dentro del grupo de riesgo. En esta nota, todo sobre el test de Sullivan, por qué es importante y cuáles son sus riesgos.
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Test de Sullivan o mejor dicho test de O´Sullivan, por qué es importante
La diabetes gestacional es un tipo de diabetes que es diagnosticada durante el embarazo. Según estudios, puede afectar del 7 al 14% de las embarazadas y su incidencia va en aumento.
Según la Asociación Americana de Diabetes, la diabetes gestacional muy probablemente desaparece después del parto, pero si el test de Sullivan detectó altos niveles de glucosa en sangre durante el embarazo, deberás tomar precauciones como seguir midiendo el nivel de glucosa varios días después del parto, y realizar pruebas de detección de diabetes cada dos o tres años. Es porque muchas mujeres que padecieron diabetes gestacional, desarrollan diabetes tipo 2 algún tiempo después.
La diabetes gestacional puede ser diagnosticada entre las semanas 24 y 28 del embarazo. Esta prueba debe ser realizada a todas las mujeres embarazadas en esa etapa, pero si estás dentro del grupo de riesgo, la prueba debe realizarse en el primer y tercer trimestre, entre las semanas 32 a 34.
En realidad, la diabetes gestacional es la complicación más frecuente durante el embarazo, y muchas mujeres que padecían diabetes sin saberlo la descubren mediante el test de Sullivan durante el embarazo.
La asociación diabetes-embarazo, si no se realiza el tratamiento correspondiente, puede ser muy riesgosa tanto para la madre como para el niño en gestación, y algunas consecuencias pueden ser realmente graves.
Cómo se realiza el test de Sullivan
Según algunas publicaciones, para realizar correctamente el test de Sullivan o test de O´Sullivan, debes concurrir al instituto en ayunas, aunque según algunas consejerías de salud no es necesario estar en ayunas.
En primer lugar te realizarán una extracción de sangre para analizar la concentración de glucosa.
Luego se administra una dosis de solución de 50 gramos de glucosa oral y a los 60 minutos se vuelve a realizar la extracción de sangre para determinar los nuevos niveles de glucosa en la sangre o glucemia plamática.
Este es un procedimiento muy beneficioso y sin consecuencias negativas.
Sin embargo puede ocurrir frecuentemente que tengas náuseas o vómitos debido al sabor o consistencia de la solución de glucosa. Si sucede esto la prueba ya no puede realizarse y será necesario concurrir nuevamente al laboratorio.
Otra consecuencia previsible es el dolor o hematoma en la zona de punción.
Si te encuentras dentro del grupo de embarazadas de riesgo, es decir si padeces obesidad, inmunodepresión, hipertensión o anemia o ya tienes una diabetes diagnosticada, los riesgos de este procedimiento pueden ser un poco mayores.
Si el test da positivo, es decir, si la glucemia a la hora es superior a 135 -140 mg/dl, es necesario confirmar este diagnóstico mediante la prueba de tolerancia oral a la glucosa.
Esta prueba es similar a la anterior, sólo que sí debes concurrir en ayunas y para hacer el diagnóstico, se deben volver a tomar muestras de sangre cada dos o tres horas. Si los resultados dan niveles elevados de glucosa en la sangre a las dos y tres horas, tu médico te explicará de qué se trata la diabetes gestacional y qué cuidados debes tomar a partir de ahora.
Si es tu caso y te estás preparando para la prueba de tres horas déjanos darte algunos consejos:
- Haz exactamente lo que tu médico te indique para la preparación. La mayoría de las veces se pide un ayuno de 8 horas, pero previamente te recomendarán evitar el azúcar o consumir hidratos de carbono.
- Trata de no hacer esfuerzos entre cada extracción de sangre ya que esto puede modificar la forma en que tu organismo procesa la glucosa.
- Trae algo para hacer durante las tres horas de espera. ¡Tres horas puede ser un tiempo demasiado largo! Algunos centros de salud cuentan con espacios para reposar pero esto no siempre es así. Lleva un libro, tu ordenador o cualquier cosa que te permita pasar el tiempo de la forma más agradable posible.
- Lleva algo de comer para cuando finalice el estudio. Galletas, queso, fruta o cualquier alimento fácil de llevar que te permita llegar a casa.
- Si piensas que puedes descomponerte, pídele a algún familiar o a tu pareja que te acompañe o vaya a buscarte a la hora de salida.
Cómo se trata la diabetes gestacional
Realmente, realizar el test de Sullivan cuando tu médico lo indique es muy importante.
La diabetes gestacional puede afectar la vida de tu futuro hijo:
- Nacimiento prematuro.
- Sobrepeso al nacer y mayor riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.
- Hipoglucemia inmediatamente después del nacimiento.
- Problemas respiratorios.
También puede perjudicar tu embarazo con un aborto espontáneo. Otros riesgos son:
- Complicaciones en el parto.
- Hipertensión arterial.
- Desarrollar preeclampsia.
- Parto por cesárea.
- Desarrollar diabetes tipo 2 después del parto.
El mejor tratamiento para la diabetes gestacional es una alimentación saludable acompañada de ejercicio. Una dieta sana y equilibrada puede ayudarte a controlar los síntomas sin necesidad de medicamentos, pero si éstos son necesarios, puede ser que tu médico te recete hipoglucemiantes orales o insulina inyectable.
La dieta debe incluir proteínas y una combinación correcta de hidratos de carbono y grasas, ya que el exceso de hidratos de carbono puede causar picos en los niveles de azúcar en la sangre.
Siempre consulta con tu médico y tu nutricionista. A continuación te daremos las pautas generales para una dieta de diabetes gestacional:
- Basa tus comidas en proteínas.
- Incluye muchos alimentos frescos y limita el consumo de alimentos procesados e hidratos de carbono.
- Toma en cuenta que sólo el 40 a 50 por ciento de las calorías diarias deben provenir de hidratos de carbono; del 20 a 25 por ciente provenientes de las proteínas y del 25 a 35 por ciente provenientes de las grasas.
Incluye estos alimentos:
- Vegetales frescos o congelados cocidos al vapor.
- Huevos o claras de huevo.
- Avena en copos con bayas.
- Fruta fresca.
- Pechugas de pollo sin piel.
- Pescado al horno.
- Palomitas de maíz.
- Yogur griego.
- Batidos proteicos.
- Sopa de vegetales.
- Frutas con poco azúcar.
- Evita las comidas rápidas, bebidas alcohólicas, bollería industrial y comidas fritas. También las bebidas azucaradas y los alimentos ricos en almidón como las papas y el arroz.
Ahora que ya sabes todo esto… ¡concurre tranquila y confiada a realizar tu test de Sullivan!
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