La semana 25 de embarazo es importante: ya finaliza el segundo trimestre y es necesario comenzar a hacer planes para las próximas semanas, que, podemos asegurarte… ¡pasarán muy rápido! Y antes de que puedas darte cuenta, ya estarás camino a la maternidad. Mientras tanto seguramente te sentirás bastante ansiosa frente al tercer trimestre… ¿Es tu caso? Relájate, disfruta tu embarazo y no te olvides de tus cuidados personales.
Embarazo: Relájate con música
Semana 25 de embarazo, ¿puede oír tu voz?
Esta semana continúa el desarrollo fetal con algunas novedades, como la alternancia entre períodos de actividad y descanso, movimiento de los ojos y desarrollo del oído, al punto que se cree que a partir de esta semana el feto puede escuchar tu voz.
Sin embargo, un interesante estudio del Instituto Nacional de Salud del Niño de Perú advierte que no solamente el feto está protegido dentro del útero de los sonidos provenientes del exterior, sino que hasta la semana 32 de embarazo el sistema auditivo no está lo suficientemente maduro como para percibir sonidos. Según estos especialistas, las reacciones fetales ante sonidos antes de esta semana, se deben a que los estímulos llegan directamente al sistema nervioso por otras vías y que esto puede ser una causa de estrés fetal. De hecho, el desarrollo del canal auditivo no se completará sino hasta los dos años de edad.
Esto no quiere decir que no debas hablar con tu futuro hijo sino más bien todo lo contrario. Se ha demostrado que la música suave y las palabras amorosas acompañadas de caricias en la panza tienen un efecto muy beneficioso sobre el desarrollo cerebral del feto, pero más que por los sonidos, por el estado de relajación y bienestar de la madre al realizar estas actividades.
Más allá de que el feto pueda escuchar o no… ¡no te prives de hablarle, cantarle y hasta leerle algún cuento! Si bien es difícil que escuche, su cerebro aún inmaduro percibe las vibraciones que llegan de todo tu organismo cuando hablas y esto contribuye al bienestar de la madre y el hijo.
Cambios fetales en la semana 25 de embarazo
Esta semana el feto tiene aproximadamente 33 cm de largo, pesa entre 700 y 800 gramos e intensifica los movimientos, como pedaleos y volteretas. También tiene períodos de sueño para descansar de tanta actividad.
Su cuerpo está acumulando grasa, y el cabello ya tiene color, aunque probablemente cambiará después del nacimiento.
Semana 25 de embarazo, cambios en tu cuerpo
Esta semana se intensificarán los malestares del aparato digestivo, debido a los niveles de progesterona en la sangre. La progesterona hace más lenta la digestión y dificulta el cierre del píloro, lo que facilita el desagradable reflujo o acidez. Además el útero aumenta de tamaño y ejerce presión sobre el estómago. Piensa que esta semana tu útero tiene el tamaño de una pelota de fútbol.
Todo esto conduce a que mires con desconfianza hasta tu platillo más preciado… No te preocupes: prueba ingerir porciones más pequeñas con mayor frecuencia y evita los alimentos muy dulces o grasos.
Por otra parte, si has aumentado rápidamente de peso o ha aumentado tu nivel de azúcar en la orina o la sangre, es probable también que indique la realización de una prueba de diabetes gestacional. La diabetes gestacional afecta aproximadamente al 7% de las mujeres embarazadas y es un tipo de diabetes que aparece durante la gestación y desaparece con el nacimiento. Sin embargo, las mujeres que padecen diabetes gestacional tienen mayor riesgo de desarrollar una diabetes tipo 2, y los niños nacidos de estos embarazos también tienen mayor riesgo de padecer obesidad y diabetes tipo 2.
Esta semana es una buena idea comenzar a hablar con tu médico y planificar cuestiones relativas al parto, como por ejemplo la maternidad en la que nacerá tu bebé y la preparación para el parto. Como ya lo hemos comentado, los médicos establecen una fecha probable de parto pero… ¡en el 70% de los casos estas fechas son equivocadas!
Además hay que tomar otras previsiones. Por ejemplo, en la semana 25 de embarazo tu panza ya tiene un volumen considerable y probablemente debas dejar de hacer cosas que hasta ahora eran habituales, como ocuparte de la casa o manejar. Si ya empujaste el asiento de tu coche hacia atrás y de todas formas tus pies no llegan a los pedales… quizás sea el momento de dejar de manejar y planificar otras formas de desplazamiento.
Uno de los riesgos de esta etapa del embarazo es el aumento descontrolado del peso. Lleva una dieta saludable y evita los alimentos ricos en grasas. Sí, en realidad, debes aumentar la cantidad de calorías, aunque no en forma exagerada: incorpora unas 200 calorías más a tu dieta a partir de esta semana.
Cosas en qué pensar en la semana 25 de embarazo
¿Ya sabes si vas a tener un niño o una niña? Entonces es momento de comenzar a pensar en el nombre del bebé. Tal vez tú y tu pareja ya hayan elegido un nombre… Si no, consulta nuestra sección de nombres para niño y niña o inspírate con tus autores, músicos o artistas favoritos.
¿Cómo va tu cuidado personal? Recuerda que no por estar embarazada debes abandonar tus cuidados personales como la peluquería, pedicuría o manicuría. Una buena sesión de pedicuría puede aportarte mucho bienestar. Si no alcanza el dinero, prueba con un tratamiento para los pies casero.
Sólo necesitas: un tazón con agua tibia, una loción o aceite de baño combinada con azúcar para utilizar como exfoliante, una toalla suave, una crema para aplicar después del tratamiento, cortaúñas, escofina o piedra pómez y el color de esmalte para uñas que más te guste. Si la panza no te permite inclinarte sobre tus propios pies… ¡pide ayuda a tu pareja! Hasta puedes convertir una sesión de pedicuría en un agradable encuentro lleno de amor y ternura.
Descubre qué ocurrirá: Semana 26